Niños Con Poderes (Klaine boyxboy)

CAPÍTULO 7: ELLIOT Y SEBASTIAN

CAPÍTULO 7: ELLIOT Y SEBASTIAN

Cuando llegaron al estacionamiento del McKinley Blaine estaba tan nervioso que los móviles de los tres no paraban de sonar. Antes de bajarse del coche, Mercedes, Finn y Kurt le dedicaron palabras de ánimo al moreno. Justo cuando salió del coche, antes de cerrar la puerta, unos brazos lo rodearon. La melena rubia no le dejaba ver pero no lo necesitaba, sabía quien era.

– Britt, cariño. Creo que Blaine necesita respirar. – Dijo dulcemente Santana. La chica se separó.

– ¿Estás nervioso? – Preguntó la ojiazul, el moreno asintió. – Que pena, yo que quería darte un beso...

En vez de eso, cogió la mano de su amigo y la apretó muy fuerte. De la misma manera, Kurt lo agarró de la otra y todos entraron con él. No lo dejarían solo.

La noticia de que el ojimiel tenía un poder y que era peligroso se extendió por todo el instituto. Muchos alumnos y profesores se alejaban del chico, pero afortunadamente tenía a sus amigos que no sólo lo aceptaban como es, sino que también lo apoyaban y ayudaban en todo lo que podían. Sue, Beiste, Will y Emma fueron los profesores que ofrecieron su cariño al menor. Los cuatro hablaron con él intentando mostrarle que podía contar con ellos sin ningún temor. Cooper se volvió la sombra de su hermano, no iba a dejarlo solo nunca más. Se sentía culpable por lo que le había pasado.

Antes de entrar en la clase de matemáticas, que compartía con Mercedes y Rachel, se le acercó un chico.

– Hola, me llamo Elliot. ¿Puedo hablar contigo a solas?

Blaine aceptó y se apartaron del grupo, sin embargo el moreno sabía que sus amigas no apartaban su mirada de ellos.

– Verás, yo... También tengo un poder... No sé si lo buscarán los que se dedican a secuestrar niños... El caso es que eres la primera persona que conozco con un poder y me gustaría que compartamos lo que sabemos... No sé, quizá podríamos vernos después de clase...

– Hoy no puede ser, he quedado con unas amigas... ¿Te parece que hablemos mañana? Así quedamos y no le doy plantón a mis amigas.

– ¿Rachel y Mercedes? ¿Ellas también tienen poderes?

– ¿Qué?... No... Ellas no tienen poder... al menos que yo sepa... Bueno, Mercedes sé seguro que no... Además quedé con Britt, San y Quinn.

– ¿Ellas tienen poderes?

– No sé nada... No voy preguntando a la gente si tiene o no tiene poderes, ¿Sabes? Después de todos los secuestros todo el mundo lo oculta... Y no me extraña.

– Lo siento, es sólo que tengo tantas ganas de conocer a gente con poderes...

– Ya me conoces a mí, de momento debería ser suficiente...

Cuando entraron en clase, Rachel le advirtió.

– Ten cuidado... Cuando secuestraron a Wes empezó a acosar a Tina queriendo saber si ella también tenía poderes...

Por su parte, Kurt y Tina estaban en clase de Español. Mr Schue todavía no había llegado y los dos estaban hablando cuando alguien se acercó a ellos.

– Hola, me llamo Sebastian... Acabo de trasladarme a Lima con mis padres... Hasta hace poco vivía en Francia, pero nací aquí... ¿Puedo sentarme con vosotros?

– Si, claro... – Dijo la chica.

– ¿Cómo os llamáis? – Preguntó el recién llegado.

– Yo soy Tina y él es Kurt.

Cuando llegó la hora de comer, Hummel fue corriendo a buscar a Blaine. Cuando lo encontró lo arrastró a un aula y cerró la puerta.

– Creo que tenemos problemas. – Dijo el castaño.

– ¿Qué ha pasado?

– En Español un chico se nos ha acercado a Tina y a mí. Dice que acaba de llegar de Francia. ¿No te resulta extraño?

– Tan extraño como que un chico se me haya acercado a mí en matemáticas, me haya dicho que tiene un poder y me haya pedido que quedáramos por la tarde para hablar. Aunque lo más raro ha sido que me haya preguntado si Mercedes, Rachel, Quinn, Santana o Brittany tienen poderes... Berry me ha dicho que también le preguntó a Tina si tiene poder...

El moreno mandó un mensaje con el móvil y un minuto después entraron las tres Cheerios.

– ¿Qué pasa Hobbit? – Preguntó la latina. Blaine se puso a pensar en lo que había visto y lo que le había contado Kurt para que ella lo supiera. – Creo que tenemos problemas... Aunque no debiste mentirle a Elliot sobre nosotras...

– ¿Cómo lo...? – Comenzó a decir el castaño.

– ¿... He sabido? Muy sencillo, leo mentes... Ese es mi poder. Britt puede hacerte ver lo que ella quiera, es capaz de manipular tu visión y Quinn tiene super velocidad... Ahora lo importante, Sebastian y Elliot han pasado por mi lectura y no he encontrado nada raro... Pero sabéis que estoy limitada, sólo leo lo que piensan... Por ejemplo, si tú pensases que no tienes poder y te gustaría tener uno mientras estás cerca mío yo creería que no tienes poder... El suricato no tiene poder o al menos no piensa en él aquí y Elliot tiene un poder interesante, me pregunto como puede interactuar contigo. – La joven señaló a Blaine.

– ¿A qué te refieres? – Preguntó Fabrey

– Manipula su cuerpo de manera que puede ser tan fuerte que podría romper un diamante o tan ligero que puede traspasar paredes... es un poder raro, parece que manipula sus células o sus átomos o algo así... Puede ser que también pueda hacer de su cuerpo un aislante de la electricidad... ¿Quién sabe? – Explicó la latina

– ¿Qué significa eso? – Quiso saber el ojiazul.

– Si fuera capaz de convertirse en un aislante, podría tocar a Blaine sin temor ninguno... – Respondió la morena

– ¿Debo quedar con él o no? – Dijo el ojimiel.

– Sí, pero en un lugar público... Entenderá que tengas miedo de que te secuestren... Queda en el Lima Bean con él. Nosotras estaremos allí para lo que sea. Por un lado temo que sea de los malos, pero por otro no me gustaría aislar a otro chico con poderes y facilitarle el trabajo a los secuestradores. – Propuso la capitana de las Cheerios.

– ¿Y yo que hago con Sebastian? – Preguntó el castaño

– Cuidate las espaldas, chico invisible. – Le dijo Santana. Kurt se extrañó, hasta ese momento no se había puesto a pensar que ellas conocían su poder. – Tranquilo, nosotras somos de las buenas.