ENTRE AMANTES

CAPITULO 12

A la mañana siguiente, mientras prepara el desayuno, Wonsik recibe una llamada de un número desconocido, que contesta sin más.

—Hola, ¿Quién es?

"Soy yo" un contento Taekwoon responde desde la otra línea mientras se cubría con las sabanas.

—¿Taekwoon? ¿Cómo conseguiste mi número? —apaga la estufa al ver el agua lista para el té.

"Me lo dio un hada madrina" sonríe divertido y bebe de su café.

—Ah, fue Hakyeon —Ravi niega con la cabeza—. Suenas raro ¿Estás bien?

"Sí, estoy bien" sonríe feliz por la preocupación del otro "sólo es una gripe"

—Oh, ¿Y por qué llamaste? Pensé que estabas enojado conmigo —prepara té para dos y busca el azúcar.

"Porque te extraño" hace un puchero dejando el café en la mesita de noche "quiero verte,Sikkie~"

—Que lindo —Ravi sonríe imaginando como se ve el mayor recién levantado—, pero si nos vemos me contagiaras.

"Es mi ultima voluntad" ríe un poco tosiendo en el proceso.

—Que exagerado —dice Wonsik riendo a carcajadas—. Si es en tu lecho de muerte voy, pero no me robes ni un beso.

"Lo prometo" sonríe emocionado "Te veo en unos minutos, te amo" dicho esto cuelga.

—Yo también —susurra con el corazón a mil viendo la pantalla de su celular—. Jiwoon, te dejo sola.

Anuncia a su hermana algo dormida, ella asiente. Entonces, Wonsik se cambia, busca su billetera y las llaves del auto para ir a casa de Taekwoon.

Al colgar Leo trata de levantarse de la cama para limpiar un poco volviendo a botarse a la cama de forma rápida por el cansancio.

Ravi, estaciona cerca de una cafetería, compra y vuelve al auto. Minutos más tarde llega a casa de Jung, toca timbre y espera a que le abra.

Leo al escuchar el timbre baja con pesadez abriendo la puerta.

—Adelante.

—Vaya, te vez horrible —dice Ravi, entra y deja un beso en la frente del enfermo—. Traje café y algunos dulces —levanta la bolsa.

—Si, también me da gusto verte —se ríe quitándole la bolsa sacando el café. Jamás se cansaría de esa bebida.

—Es un placer alegrarte la vida —Ravi agarra de la mano al mayor y lo lleva al sillón, ambos se sientan ahí— ¿Tomaste algún medicamento? —Taekwoon niega rápido.

—Pensé que no vendrías.

—¿Por? —Ravi entrelaza sus dedos atrayendo la mano de Leo a su pecho.

—No lo sé —sonríe bebiendo un poco— ¿Ya lo pensaste?

—¿Por qué crees que viene a cuidarte? —sonríe agarrando el otro café de la bolsa—. Pero debes esforzarte, tienes sólo una oportunidad.

Leo casi le salta encima de la alegría.

—Quisiera besarte en este momento.

—No, me llenarás de gérmenes —dice Wonsik haciendo una mueca exagerada de asco.

—Exagerado —ríe—, pero cuando mejore, te tragaré a besos.

—Me gusta como suena eso —sonríe y bebe de su café.

Se quedan unos segundos así, en silencio mirándose y bebiendo del café.

—Oye.

—¿Qué?