CAPITULO 6

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Por suerte Wonsik no tenía trabajo esa noche. Se siente ansioso mientras se coloca la chaqueta de cuero negro que combina con sus apretados pantalones. Se mira al espejo y sonríe. Se llevaría muchas miradas, pero la única que le importaba era la de Taekwoon. Sale de la casa y sube al auto para conducir rumbo al cumpleaños de su amigo.

Taekwoon al estar en la cocina terminando los últimos detalles de la comida, no presto atención a los invitados hasta que escucho la voz de Wonsik, enseguida salió de la cocina para recibirlo junto a Jaehwan.

—¡Feliz cumpleaños, Jaehwan! Mírate nada más, cada día más viejo —bromea Ravi, abraza a su amigo posando sus ojos en el novio. Decepcionado de aún verlos juntos.

—Muchas gracias por venir, Wonsik —dice Ken con una ligera sonrisa extiende su mano hacia adentro—. Adelante, no te quedes ahí, en la cocina hay bebidas.

—Gracias a ti por invitarme, guapo —sonríe Ravi, le guiña un ojo a Ken antes de ir por una bebida a la cocina.

Taekwoon sonríe de oreja a oreja sin dejar de ver a Wonsik, evitando morder su labio en presencia de su pareja.

—Anda, ve con tus amigos, yo iré a ver la comida —sonríe Leo dejando un beso en la mejilla de Ken.

Wonsik destapa una cerveza y toma varios tragos, se siente muy nervioso. ¿Qué debe hacer? ¿Actuar normal, fingir que no paso nada entre Taekwoon y él? ¿O intentar declararse cómo tenía pensado? Todos sus pensamientos desaparecen cuando lo ve entrar a la cocina.

—Te vez muy guapo el día de hoy —sonríe Taekwoon dándole una nalgada al menor, se coloca el mandil comenzando a preparar distintos tipos de salsas.

Wonsik pega un brinco y sonríe devolviéndole el manotazo. Al parecer eso de ser desconocidos no funciona para ellos.

—¿Te parece? Me teñí la semana pasada —cuenta Ravi pasando las dedos por sus plateados cabellos—. Tú te vez hermoso, como siempre.

Leo se sonroja un poco por el halago y pone los ingredientes en la licuadora.

—oh, bueno... gracias

—Taekwoon —llama el menor, sintiendo su corazón palpitar con rapidez cuando el otro le mira—, te extrañe —una sonrisa se dibuja en los labios del mayor.

—También te extrañe, Wonsik y mucho.

Ravi mira alrededor cuidado de que no haya nadie, se relame el labio y besa al mayor, con pasión, con hambre, introduciendo su lengua de forma desesperada, pegándolo a su cuerpo al rodearle la cintura con un brazo. Taekwoon al sentir el beso no duda en corresponder, perdiéndose en la pasión del otro sólo atina a jugar con su lengua.

—Me vuelves loco —susurra el menor al separarse.

—Te amo tanto, Wonsik, tenerte aquí es tan difícil.

—¿De verdad me amas? —pregunta mirando con emoción los ojos del contrario.

—No lo puedo negar —sonríe volviendo a besarlo—, necesitó que estés cerca mío.

—Soy sólo un capricho para ti —Wonsik sonríe triste y le da un suave beso—. Aún estás con Jaehwan y no lo vas a dejar hoy por mí.

—No lo puedo dejar, aun siento algo por él —dice Leo, rompiendo el corazón de Ravi y volviendo a cocinar.

¿Qué no se daba cuenta? ¿Por qué no veía esos ojos tristes?

Wonsik sonríe a pesar de la opresión en su pecho.

ENTRE AMANTESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora