Hace apenas dos días que Perseo se retiró debido a una emergencia familiar y, aunque suene exagerado, ya lo extraño. Es aburrido llegar a la habitación sin tener a nadie a quien molestar. Encontrarse miles de millas a distancia, sin conocer realmente a nadie, hace que las horas parezcan eternidades. A pesar de que mis compañeros de trabajo han sido amables, no es como si habláramos en todo momento. El hotel se ve bastante desolado, ya que con estas tormentas es difícil que turistas vengan a hospedarse. La mayoría de la gente aquí solo espera a que el clima mejore para retirarse y los pocos que llegan es debido a negocios.
El día de ayer decidí bajar de nuevo al sótano, esta vez con más cuidado para no morir en el intento. Tenía curiosidad de ver qué más había en aquellas cajas que abrí por accidente. Me parecía extraño que el hotel guardara las pertenencias de alguien, lo que me hacía pensar que tal vez eran de algún empleado o de un huésped bastante olvidadizo. De cualquier forma, mi aburrimiento me dirigía a indagar más, después de todo, no es como si tuviera un día muy ocupado. Una vez abajo, me percaté que junto a las cajas ya abiertas se encontraba una más pequeña, la cual estaba sellada con cinta adhesiva. Debido a su tamaño, decidí que sería mejor llevarla hasta mi habitación y abrirla ahí mismo.
Procurando actuar lo más normal posible, salí rápidamente de ahí y caminé por los pasillos como si el haber ido al sótano hubiera sido parte de mi trabajo.
-Hola... ¿qué tienes ahí? -Un escalofrió recorrió velozmente mi cuerpo, pero (tan rápido como sucedió) logré tranquilizarme- ¡Hola Aquamarine! No te vi-. Ella se encontraba enfrente mío y literalmente no la había detectado en ningún instante.
-Espero eso no sea un chiste- dijo un tanto indignada viéndome a la cara y subiendo la suya.
-¿¡Cómo crees?! Jamás me burlaría de tu estatura. Es solo que estaba distraída.
-Mmm... Ya veo. No te distraigas demasiado o podrías terminar chocando con alguien. Ahora, regresando a la pregunta, ¿qué es esa caja? - mencionó con cara seria apuntando a lo que traía entre mis manos.
-¡Oh! ¿Esto? Es...- tenía que pensar en algo creíble y pronto -me lo dejó encargado Perseo con el Sr.Baltaza. En sí, vengo de recogerlo- le sonreí, pero creo que notó en cierta forma mi nerviosismo.
-Ya veo- me miró con suma indiferencia -Bueno, sólo pasaba a decirte que te necesitamos en el turno de la noche.
-Debes estar bromeando- cambié totalmente mi expresión al saber la noticia.
-Lo siento, pero ayer fue el turno de Zircón. Con el personal tan bajo, necesitamos a alguien que nos ayude de guardia en lo que regresa tu novio. Preséntate a la media noche. Yo cubriré a partir de las 6 a.m.
-De acuerdo, gracias por el aviso.
Al parecer mis planes de ir directo a mi habitación a indagar más sobre esas viejas cajas se había pospuesto para más noche. Por ahora, lo mejor sería descansar para la larga velada de uno que me esperaba. Preparé mi alarma y, una vez frente a la cama, dejé que la gravedad hiciera lo suyo.
La alarma de mi celular sonó tan fuerte como podía y con las escasas energías que tenía mi cuerpo logré apagarla sin caer dormida en el intento. -Hora de trabajar.
Me cambie la parte de arriba, pues ya tenía puestos los pantalones del uniforme y zapatos para ahorrar tiempo. Salí hacia la recepción, no sin antes meter la caja dentro de una mochila.
-Buenas noches Zircón, ya puedes ir a descansar- dije entre largos bostezos que reflejaban mi más profundo sentimiento de cansancio.
-Pensé que sólo serías la recepcionista- contestó mientras tomaba sus cosas de una mesa del lobby.
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You are on my Mind [LAPIDOT AU]
Hayran KurguUna pareja viaja por todo el país en busca de una nueva oportunidad. Al llegar a su destino se encontrarán con todo lo que habian estado deseado; así como también tendrán encuentros con gente que cambiará la forma de ver aquello que creian conocer. ...