- Yona ¿Puedo pasar? será solo un segundo- soló bastó tocar la puerta una vez para que esta se abriera y lo empujara dentro.
- Lo que viste hoy no es así- empezó a defenderse la muchacha sin siquiera saber lo que su amigo venía a decirle.- Somos primos sabes.
-Venía a decirte que vayas al baile con él, yo no podré ir- dijo firme mirándola a los ojos.
-¿Porqué no irás?
-¿Porqué?
-¿Te sientes mas acaso? el baile es mañana.
- Tranquila, tu si irás... yo no me siento bien, creo que estoy resfriado- mintió Hak tocándose la nuca en modo de disculpa.
- Es terrible, debemos ir al medico si no te encuentras bien- como por reflejo tomó la cara del morocho y llevó sus labios a la frente para saber si este tenia fiebre. Hacho que hizo sonrojar a Hak pero sin que se notara por la poca luz que había en ese momento- no tienes fiebre pero se te ve algo sonrojado, quizá si estés pescando un resfrío.
- Yona yo...- esta vez él tomaba con sus manos el rostro de su princesita y la miraba a los ojos y la boca. Ahhhh esa boca como deseaba acercarse más- debes ir con Soo-Won- repitió y la soltó rápido para irse.
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Ella estaba confundida y le latía fuerte el corazón, tal vez estaba resfriada tambien. Al dia siguiente Soo-Won invitó a Yona nuevamente al baile y esta aceptó. Esta misma noche sería el dichoso y tan esperado baile.
Hak por otro lado estaba dispuesto a fingir un resfriado para ver a su compañera del alma tomar la mano de alguien más con tal de que ella fuera feliz. Además era un simple baile, el podía verla cuando quisiera y eso lo dejaba más tranquilo.
Ese mismo día, cuando Yona fue al baño del colegio escuchó una conversación entre chicas que llamó su atención.
-No puedo creer que Son Hak rechazara a Lili.
-Parece que fingió un refriado para no ir al baile, eso me contó Jae-Ha que está en su clase.
- Es tan evidente que le gusta esa pelirroja- se reían todas al contar el chisme.
- Y ahora ella lo cambia por otro.
-Si es cierto bueno se lo merece por rechazar a Lili.
-Bueno basta, vayámonos que ya es tarde.
Terminaron de arreglarse en el espejo y se marcharon, sin darse cuenta de que Yona estaba allí dentro escuchando todo accidentalmente.
Al llegar a casa ella hizo como si nada hubiese escuchado y se preparó para la fiesta aunque en su cabeza pasaran miles de cosas que la tenían inquieta.
Sacó del armario un vestido blanco con encaje que le llegaba hasta la rodilla, vistió medias color piel para evitar el frío y se puso unos tacos nuevos que habia comprado para la ocasión. Terminando por pintarse y recoger aros y pulseras que habia desparramado buscando los que combinaban con su vestimenta, claro que en su cabello usaría el broche que su primo le obsequió. Le parecía un momento adecuando para lucirlo.
Soo-Won fue a buscarla a su casa, con un traje blanco que lo hacia parecer un príncipe junto con un ramo de flores, solo le faltaba una espada y un caballo. Y allí estaba Yona, también radiante y listos para irse camino al baile.
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Hak no presenció la partida de estos dos, prefirió quedarse en su habitación cambiándose para seguirlos y proteger a Yona desde las sombras por si algo ocurría o por si lo necesitase.
