Caperucita Roja Kuroshitsuji:la leyenda del hombre lobo(I)

Cap.19:sé quién eres

Ciel y Undertaker salieron a toda prisa del edificio.
Afuera estaba oscuro,no se veía nada y para colmo hacía frío.
Ciel se puso su capucha roja,mientras Undertaker cogía una antorcha y su fusíl.Miraron por todas partes,hasta que finalmente,encontraron un cadáver cerca de allí.
Se acercaron,y observaron con detenimiento al muerto,que estaba abierto en canal y tan herido que se formaba un charco de sangre a su espalda.
-¡Oh,no!-gritó Ciel al verlo.
-El cadáver es reciente.-añadió Undertaker-¡puedo verlo!¡sé por dónde ha ido el lobo!-Undertaker corrió hacia otra zona,y Ciel fue tras de él.Tan rápido como pudieron,llegaron hasta la plaza del pueblo,en la que no había ni un alma.
-Está cerca de aquí.-dijo Undertaker-Ciel,nos dividiremos para encontrarlo,tú ve por la izquierda y yo por la derecha.
-Pero...-antes de que pudiera continuar,Undertaker le dio su fusíl a Ciel.
-No dejaría que fueras desarmado.Si le ves,dispárale.
-Vale.-Y con esto,Undertaker se fue,y Ciel,solo con su valor y el fusíl,fue caminando por las oscuras calles que convergían de la plaza...

Ciel andaba con lentitud y constantemente en alerta.Él no estaba tranquilo,el lobo podría estar en cualquier parte,y nadie podría salvarlo si no le disparaba a tiempo.
Sus manos empezaban a temblar,su cuerpo sudaba ligeramente...
De pronto,de las sombras,algo apareció de la nada.
Se trataba de un lobo negro,con los ojos amarillos como una serpiente que le miraban sin piedad,los dientes afiladísimos y las garras cubiertas de sangre,cinco veces más grande que una persona.
No había duda,él era el hombre-lobo.

El lobo se acercó a Ciel,amenazante,acorralando al chico,que cada vez estaba más aterrado,contra la pared de piedra de una casa.
La respiración de Ciel se agitaba,intentaba,sin éxito,cargar el fusíl con sus manos temblorosas,augurando su muerte.
Hasta que oyó una voz,potente y terrorífica.
-Ciel...
-¡¿Quién me llama?!
-Ciel,soy yo...-Ciel miró hacia el lobo.Entonces se dio cuenta,la voz era de él,le estaba hablando.
-¿Cómo sabes mi nombre?-preguntó,empezando a calmarse poco a poco.
-Te conozco desde hace años,Ciel,sé perfectamente quién eres,y por todo lo que has pasado.
-¿Qué quieres de mí?¿Y si me conoces por qué matas a mi prometida y a mi hermano?
-Todas esas muertes son inútiles,en eso coincido contigo.Solo quiero una cosa...que estés conmigo y me sigas.
-¿Cómo?
-Ciel,te propongo un pacto.Ven conmigo,aléjate junto a mí de estos malditos...y no volveré a matar a nadie.Te daré hasta mañana para pensarlo,vendré a buscarte a la plaza a media noche.
Ciel se quedó paralizado,observando al lobo,el cual tras decirle estas palabras,se fue tan tranquilamente...sin hacerle ningún rasguño.