Caperucita Roja Kuroshitsuji:la leyenda del hombre lobo(I)

Cap.23:protección

Ciel llegó a su casa corriendo,donde le estaba esperando Claude.
-Ciel,¿qué te pasa?
-Tío Claude...sé quién es el lobo...-dijo Ciel alarmado.
-¿Ah,sí?-respondió Claude algo asustado,cosa que no era normal en él.
-Es el abuelo Tanaka.Él ha estado matando a toda esa gente desde el principio.
-Ah...no creo que sea él,Ciel.Estoy seguro de que alguien tan inofensivo como tu abuelo no haría tal cosa.
-Que sí,tío,te lo juro.El lobo huele igual que su ambientador de vainilla,¡lo he visto!
-Ya veo...tranquilízate,Ciel.Mira,iré contigo esta noche a su casa y te demostraré que él no es un hombre-lobo.Confía en mí.
-Vale...eso espero,tío Claude.
-Muy bien,pues espérame allí esta noche,y compruébalo con tus propios ojos.
Ciel miró a su tío,su mirada era fría y sin compasión,pero aún así,decidió ignorar esto.
Directamente salió de casa,y se fue a dar un paseo para despejarse.

Al cabo de un buen rato caminando,llegó hasta el lago,aquel en el que siempre se reunía con Sebastian cuando eran pequeños.
Se paró frente a este,y comenzó a contemplar su reflejo en el agua helada.
Por unos instantes,empezó a pensar.Cientos de cosas le venían a la mente en ese momento.
Entonces,sintió una presencia detrás suya,y una mano tocó su hombro.
Ciel se dio la vuelta,y allí estaba,tan guapo como siempre y vestido de negro,Sebastian.
-No esperaba que tú también vinieses aquí hoy,Ciel.-le dijo Sebastian sonriendo.
-Lo sé,es que necesito despejarme un poco.Hay tantas cosas que me están pasando últimamente...
-No te preocupes,Ciel.-Sebastian colocó sus fuertes brazos alrededor de Ciel,en señal de cariño-si necesitas ayuda en algo,puedes contar conmigo,lo sabes.
-Hay algo que quiero decirte Sebastian.
-¿El qué?
-El hombre-lobo...creo que podría ser mi abuelo.Se lo he contado a mi tío y dice que él no es,y estaba muy raro.Me ha dicho...que esta noche vayamos a ver al abuelo,pero...no me fío.
-Entiendo.Podrías estar en peligro.
-Sebastian,tú sabes defenderte contra los lobos,sabes qué hacer si atacan y cómo desenvolverte por el bosque.¿Podrías acompañarme esta noche allí?Quiero que vigiles escondido,y si ves algo extraño me avises.
-Yes,my lord.
Y con esto,Ciel ya se sintió más tranquilo sabiendo que tenía protección si el abuelo se transformaba.
Miró a Sebastian,a sus increíbles pero hermosos ojos rojos,que le miraban con mucha dulzura.
Ciel estiró su mano,levemente,y cogió la de Sebastian.
-Gracias,Sebastian,por todo lo que haces por mí.
-No hay de qué,mi caperucita roja...
En silencio,Ciel fue lentamente cerrando sus ojos,acercando su cara a Sebastian.Este otro hizo lo mismo,así,hasta que los labios de ambos se juntaron,uniéndose en un cálido beso,junto al lago en el frío invierno.