Quédate (eaktrap)

Capítulo 2

Ya había pasado 1 día, pero eak sentía como si fuera un año, realmente no sabía cómo mierda el león podía pasar todo el día con la vista fija en algún lugar fuera de la celda, sin mover ni un solo pelo.

En la noche tubo que dormirse en una posición algo incomoda que digamos, ya que aún tenía las cadenas puestas por lo que no se podía mover. Pero a pesar de todo intento conciliar el sueño, aunque le costó bastante lo logro.

Se despertó a mitad de la noche al escuchar un ruido, miro a los lados aun dormido y lo único que pudo ver era a una mancha naranja en una esquina y afuera de la jaula pudo notar como dos personas arrastraban algo, estaba muy cansando para poder entender lo que había pasado por lo que siguió durmiendo.

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-¡¡Hora de la comida!!- grito uno de los chicos que había sido responsable de que el terminara allí.

Noto como de una bolsa estaba tirando hacia las jaulas una barra de pan.
A town le llegó uno
A eak también le llegó otro

Town tomo el pan y comio un poco lentamente, parecía disfrutarlo como si fuera oro, dejo de lado el resto y fijo su vista en eak que comía el pan como si de nada se tratara.

-O-oye- se atrevió a hablar el león para darle un consejo a su compañero -yo diría que lo guardes- cuando terminó de hablar eak siguió comiendo a su ritmo.

-¿porque deberia? Yo quiero desayunar ahora- dijo sin darle importancia a lo que decía el león.

-es-eso no e-es tu desa-desayuno, es la-la co-comida que ten-tendras en todo el día- hablo algo intranquilo por lo que le costaba pronunciar las palabras, sentía como si el corazón le fuera a mil, el pensaba que en cualquier momento saltaria a atacarlo y el no podría hacer nada.

-¡¿QUE?!- dijo gritando exageradamente, ya casi no tenía nada, suspiro y dejó la comida de lado.

Paso un rato mirando a town, noto que tenía algunas flores dibujadas es su rostro, no le llamo para nada la atencion, era lo mas normal del mundo pintar la cara de las personas en los circos llamativamente para que los niños tuvieran interés en estos.

-oigan- dijo uno de los chicos de cabello azul largo -hoy hay función, preparense- dijo sonriendo. -como tu aun no sabes que debes hacer dejaré que tu compañero te explique sobre todo- se fue caminando por donde había venido.

-¿que tengo que hacer?- dijo sintiendose algo indiferente respecto al tema.

-yo.. No se.. - dijo mirando hacia abajo -supongo que será que levantes uno de los aros en el aire para que salte por allí-

-¿¡no se pueden comprar un maldito palo que lo sostenga para eso?!- hablo muy molesto, ya lo había aceptado, no iba a salir de ahí nunca mas, a no ser si se daba la oportunidad perfecta.

-ya sabes... No es lo mismo un palo que un chico mitad águila- hablo mirando hacia otro lugar que no sea sus ojos, seguia pensando que en cualquier momento saltaria a matarlo.

Se quedaron un rato en silencio, hasta que el águila decidio preguntar cosas básicas -y......¿como te llamas?- un escalofrío bajo por su espalda.

-me llamo towntrap- dijo abrazando sus rodillas y poniendo su cara encima de estas.

-¿cuantos años tienes?- pregunto tratando de crear tema de conversación ya que se aburría demasiado. Aunque realmente la vida del chico que tenía al lado no le importaba ni ocho carajos, era agradable escuchar su voz.

-tengo 17 años, ¿y tu?- pregunto tratando de seguir la conversacion.

-me llamo eak, tengo 16- el águila se quedó mirando en silencio a el león, cosa que comenzó a intimidarlo, suspiro un poco al notar su nerviosismo -sabes no voy a matarte no nada por el estilo, tranquilizate-

Town subió la mirada, era la primera vez que hacía contacto visual con el águila, realmente sus ojos eran hermosos, pero seguía teniendo esa mirada fría.

En cambio eak, sonrió al ver cómo su compañero tomaba poco a poco confianza.