CAPÍTULO 8

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-¿Te importaría traer palomitas? Ya que tú sabes dónde están y eso y para no molestarles a ellos.

Colton y Ryder están en una parte del sofá acurrucados con una manta y a continuación Marta, todavía sin pantalones y medio recostada dejando a la vista todo, y yo entre ella y Kyle cosa que me agrada.

De mala gana bajo a por las putas palomitas acompañada por mi fiel seguidor que se gana unas cuantas una vez que las he hecho al microondas. Hago los dos únicos paquetes que hay y le entrego uno a la parejita que están súper monos y otro se lo doy a ella que por arte de magia tiene las piernas estiradas sobre mi sitio muy cerca de el que parece concentrado en su teléfono.

Me siento y Mushka lloriquea por qué no hay sitio para él en el sofá

-Lo siento mi bebé

Le doy un par de besos y unas cuantas palomitas

-Cuantas veces tengo que decirte que no le des comida nuestra que se mal acomstumbra

Susurra tirando de mi antebrazo para que me acerque más a él.

Pasa la primera media hora eterna, todo el rato ofreciendo el bowl para que él coja y le rocen las manos, mirándole sin parar.

De pronto, nos dice que no paremos la película que va un momento al baño y en cuanto ella sale por la puerta no sé por qué Mushka la sigue pero no me preocupa

-Estas celosa y te he dicho que no debes estarlo

Susurra contra mi oreja pasándome un brazo por los hombros, está cayendo una tormenta del diablo y no creo que haya mejor plan que este, pero sin esa.

Suspiro resignada sin querer quitarle la razón pero no puedo evitarlo, siento que esto es una lucha por ver quién consigue más atención por su parte y de momento voy ganando.

En cuanto se vuelve a sentar en el sofá observa su brazo sobre mi con mala cara, muy mala cara cosa que me hace querer dar volteretas aunque suene cruel.

Llueve tanto que tenemos que subir un poco la voz para que el sonido del cristal no retumbe y la película se me está haciendo eterna cuando casi llevamos ya las dos horas, su presencia me pone nerviosa.

-Nosotros nos vamos a la cama que ha sido un día largo y hemos comprado un pequeño colchón inflable para que duermas en nuestra habitación, aseguran que es cómodo.

-¿Y ella donde duerme?

Intenta sonar inocente jugueteando con el borde de su camiseta

-Conmigo

La voz le sale tan grave que es jodidamente sexy

-¿Por algo en especial? Antes me habéis dicho que no estáis juntos

-Pues te tenía que haber dicho también que no doy explicaciones. Buenas noches a todos.

El ambiente se pone más tenso de lo normal después de eso y quiero hacerle una estatua por lo borde que ha sido aunque tampoco está bien.

En el pasillo hay un par de palomitas en el suelo que supongo se le habrán caído.

-¿Y el perro?

Pregunto cuando estoy en la cama hojeando un rato el móvil y no noto su presencia

-Se habrá quedado abajo imagino pero le escucharé si quiere entrar.

Ambos oímos un chillido seguido de un vaso roto en la planta de abajo y salimos disparados de la cama a ver qué les ha pasado.

Quiero morirme cuando veo a los chicos pegados al cristal de la terraza observando fuera algo en la lluvia, mientras que ella está llorando en la encimera. No comprendo nada hasta que le veo. Mushka tirado en el césped, empapado y tiritando mientras emite pequeños gemidos.

Tú efecto en mi 2 [ACABADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora