Tú efecto en mi 2 [ACABADA]

CAPÍTULO 14

Las lágrimas caen por mis mejillas mientras literalmente corro hacia casa de Kyle y Ryder. Debo parecer una loca ahora mismo pero no me importa, me preparé ese examen a conciencia, llevo los tres años de carrera preparada para esta beca, apruebo el examen y la consigo y la jodida puta de mierda me lo arrebata en segundos.

Llamo al timbre como una loca y escucho a Mushka ladrar nervioso, ahora mismo no podría ni pensar en él solo pienso en mi puño contra su cara.

En cuanto se abre la puerta veo a Kyle sin camiseta, los chicos en el sofá y Marta sonríe al verme ahí de pie. No lo pienso ni medio segundo más y me tiro encima dándole un par de puñetazos

—¡Que cojones te pasa!

Kyle se acerca a nosotras y me intenta levantar de encima suyo pero ve que ambos nos tenemos cogidas por el pelo y si levanta a una de lleva a la otra a rastras.

Todo se vuelve un conjunto de chillidos y se que ella es lo que quería exactamente

—¡ERES UNA PUTA ZORRA!

Le chillo intentando deshacerme de su agarre, Kyle también lo intenta y nos agarra a ambas las manos intentando quitar el lío de pelos

—¡No puedes presentarte en mi puta casa y ponerte así sin explicarlo!

—¡TU SABES POR QUE ESTOY AQUÍ HACIENDO ESTO!

Sigo llena de lágrimas y Kyle consigue soltarnos pero dura poco por qué nos volvemos a enganchar.

Se escuchan sirenas de policía fuera y como la puerta está abierta de par en par antes de que entren los agentes sin verlo venir me da un cabezazo en la nariz haciendo que la tenga que soltar por el dolor que siento

—Todo el mundo quieto ahora mismo.

Me sostienes por los hombros y otro agente sostiene también a Marta.

Ryder y Colton están desde el sofá sin saber ni qué decir

—¿Quien va a ser el encargado de explicar que está pasando aquí?

—Necesito...

—Callese, si yo fuera usted no abriría la boca ni para respirar

Decido quedarme callada luchando por mi misma contra el mareo

—Estábamos los cuatro tranquilos aquí y de repente han llamado a la puerta y al abrir se ha lanzado a por mí como una loca golpeándome.

El policía la suelta mientras que a mí me sostienen las manos en la espalda

—¿Eso es cierto?

Todos me miran y yo asiento intentando quitarme la sangre de la cara que aún noto bajar por la nariz pero no puedo retirarla

—¡Tengo motivos!

—¿Es cierto que ha entrado usted en esta propiedad privada y ha golpeado repetidas veces a la señorita en su domicilio?

—Si pero no es su casa

Escucho un tintineo metálico y mucha presión alrededor de las muñecas. Perfecto, me han esposado.

—¡PUEDO EXPLICARLO!

Me intentan arrastrar fuera de la casa

—Ni siquiera es su domicilio, tendría que presentar cargos el responsable de la casa no ella

—¿Es usted el titular de esta casa? Acompañenos fuera

Kyle sale con los agentes, conmigo esposada y cierra la puerta tras de el.