Parte 8

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Es la hora del almuerzo antes de que Stiles vea a Paige o a Derek de nuevo, y este último lo arrastra a su mesa automáticamente. Está ubicada a las afueras de la escuela y Stiles está orgulloso de tener una vista completa de la mesa donde Paige está estudiando. Es una buena señal. Stiles la mira de vez en cuando y suspira cuando Peter se les une.

Se roba algo de la bandeja de Derek— Saludos, muchachos —dice él en voz tranquila.

Derek empieza a insultarlo instantáneamente y Peter hace extrañas amenazas de vuelta, como si conociera algo de la situación de Stiles.

—No estará aquí por siempre —dice Peter mientras que Stiles piensa en la forma de conseguir que Derek y Paige choquen contra el otro en la noche. No puede arriesgarse a llegar tarde, porque Derek solo la ignorará. Tal vez pueda activar la alarma de incendios, ya que todos tienen que quedarse en un mismo lugar hasta que ya no haya peligro—. Tal vez alguien de aquí podría cambiar la situación —continua Peter.

—Stiles —dice Derek—, ¿por qué tienes un soldado de juguete en tu cabello?

Stiles está demasiado ocupado intentando ver qué libro está leyendo Paige para colocar la conversación en esa dirección— Jugué conmigo mismo esta mañana —dice.

Peter rompe en risas. Stiles lo mira y luego a Derek, que se ve como si lo hubiera atropellado un autobús.

—Me refiero a mi primo, oh por dios —dice él, agitando los brazos de forma rápida, agarrando el soldado de plástico y lanzándolo detrás de algún arbusto. No hay duda de porqué su papá se estaba riendo de él cuando salió corriendo por la puerta esta mañana. Y también ese chico cara de comadreja en Historia— Se parece tanto a mí que a veces olvido que, de hecho, no es yo.

—Austin Powers —dice Derek—, hay una película.

—Me gusta el Dr. Malvado —dice Peter.

Stiles deja de mirar a Paige un momento para girarle los ojos a Peter— Por supuesto que sí.

— ¿Qué se supone que significa eso? —Responde Peter— Esperen, ¿a quién estamos mirando?

—Paige —dice Derek con voz fastidiada—. Stiles cree que es preciosa.

—Lo es —insiste Stiles—. ¿No lo crees, Derek?

—Arrogante, pálida, antisocial —dice Peter, mirando a Paige de arriba abajo—. Diría que es perfecta para ti, Derek.

—Sí, sí, ambos son buenos comediantes —murmura Derek—. En serio, Stiles, ¿en qué estás pensando justo ahora?

— ¿Estoy pensando en chelos? —miente él.

Derek le frunce las cejas. Stiles resiste valientemente el querer preguntarle sobre ellas cuando está transformado en lobo. Especialmente porque, en teoría, Stiles no ha visto a este Derek transformarse aun. Ooh. Se pregunta qué sería necesario para sobornarlo y que se transforme para él.

—Estás mintiendo —dice Derek en voz baja. Stiles lo mira, sorprendido—. Averiguaré porqué —sonríe enigmáticamente hacia él y se levanta de la mesa—. Te veré esta noche —dice antes de empujar las manos en sus bolsillos y comenzar a silbar mientras camina hacia los chicos que Stiles vio el primer día en el que llegó aquí.

Stiles niega con la cabeza y se desliza aún más en su asiento.

— ¿Entonces crees que a Derek le gusta esa chica, Paige? —le pregunta Peter.

Stiles se endereza de nuevo y le da a Peter su mejor expresión hosca— ¿Aun estás aquí?

—Aparentemente.

—Sí —dice Stiles—, pienso que ella es la chica perfecta para él y que serían mágicos juntos.

—También lo creo —dice Peter, mirando a Stiles con determinación—. Buena charla, Stiles.

—No, no lo fue —le dice, pero Peter se levanta y comienza a irse—. ¡Cualquier charla contigo es una mala charla!

Peter no le responde, pero está bastante seguro de que lo escuchó. También hay algunas desventajas de ser hombre lobo y Stiles las conoce todas.

Fly a Little Faster [traducido]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora