13. Deseo carnal- (Larry Stylinson) -Terminada

Nueve.

Durante dos días más, Louis recopiló fotos para el reportaje y para los catálogos que Harry le había encargado.

Tenía que terminarlo antes de la celebración de su fiesta anual para socios y posibles patrocinadores de la constructora.

Para ello, el ojiazul pasó mucho tiempo con Matt y no vio a Harry pero si se enteró con gran pesar, que él y su prometido lo habían arreglado y su boda seguía adelante.

Finalmente, Louis aceptó salir con el aparejador, entendiendo que era tonto por esperar que Harry dejase a su prometido por él y la verdad, Matt era un hombre inteligente, sencillo y muy atractivo, merecía se una oportunidad.

Después de tener todas las fotos, aún le quedaba trabajo en su estudio, ya que tuvo que seleccionarlas, escanearlas y montar los catálogos y carteles, luego tendría que diseñar los folletos e imprimirlos, entonces su trabajo ya estaría listo.

Mientras, el empresario se volvió a quedar sólo pues James terminó por irse con su jefe de viaje nuevamente y aunque le cansaba esa devoción que su prometido tenía por Cowell, prefirió no discutir.

Tras verlo partir, Harry volvió a ir al local de Zayn y se tomó una copa pero el morocho estaba muy ocupado pues su negocio era un éxito total y de nuevo apenas pudieron hablar.

Horas después, el empresario rizado ya se iba pero entonces escuchó una voz familiar que pasaba a sus espaldas, se giró y ahí estaban Matt y Louis, riendo con una copa en la mano y caminando hacia los lavabos.

Harry se temió que seguro irían a tener sexo, por lo que sintió un deseo irrefrenable de seguirlos y en su molestia, sin darse cuenta apretó fuertemente su puño, rompiendo el vaso que tenía en la mano.

...-Maldita la hora en que los junté.

Tras seguirlos, en la puerta de los lavabos, el ojiverde baciló si entrar o no, entonces puso la oreja a ver si escuchaba jadeos pero solo oyó las risas sonoras de Louis.

Finalmente optó por entrar dando un portazo y sobresaltado a Matthew, el cual lavaba sus manos, mientras que hablaba con Louis, quién estaba en uno de los cubículos.

-Oh joder Ha-Harry, que susto ¿cómo es que entras así?.

-La puerta no me abría-mintió.

En ese momento el fotógrafo salió y se asombró al ver al rizado en la puerta del baño, mirando con ojos de rabia, como Matt se lavaba sus manos.

-Emm... ¿nos vamos?- preguntó tras acercarse para lavar las suyas -...creo que ahora si pondrán la canción que te decía antes que me encanta.

-Si vamos precioso-dijo Matt tocando su hombro.

Los dos muchachos salieron y Harry se quedó solo en el baño, maldiciendose porque aunque estaba comprometido, le molestaba que esos dos estuviesen juntos fuera del trabajo.

La verdad era que le hubiese gustado hacer desaparecer a su primo en ese instante y volver a meter a Louis en el cubículo y follarselo de nuevo.

-¿Qué demonios te pasa Harry?, tú amas a James-se decía a sí mismo golpeando la pared con su puño -...él es a quien tienes que desear

Finalmente salió de los lavabos también y se sentó en la barra de nuevo, desde donde veía a Louis bailando con el «moscardon» de Matt, el cual no paraba de rondarle.

Asqueado pidió otro whisky y luego otro, mientras la sangre le hervía y tras tomarse unos cuantos, no pudo resistir más y se fue hacía ellos.

-¿Puedo bailar contigo, Louis?- le preguntó susurrandole al oído por detrás, mientras le ponía las manos en la cintura.

El ojiazul se estremeció y acto seguido miró a Matt, que frente a él los miraba asombrado.

-¿Qué estás haciendo, Harry?, Suelta a Louis, él está conmigo

El ojiazul se giró y se apartó del rizado, la verdad no quería que se armase un escándalo y mucho menos que los dos primos se peleasen por él.

-Tranquilo Matt, vámonos, Harry está borracho y no sabe lo que hace.-dijo este agrrando la mano del aparejador y marchándose de allí.

El ojiverde se quedó nuevamente solo y tambaleandose en medio de la pista, mirando por donde Louis y Matt se había ido, entonces de repente no sabía qué demonios hacía allí.

El empresario se sintió un verdadero gilipollas, el cual al parecer no lograba entender ¿qué era lo que lo había impulsado a celar a Louis y a olvidarse de nuevo de su compromiso?.

Tras regresar a su casa y pegarse una larga y fría ducha, el empresario se sentía confuso pero luego empezó a pensar que quizás eso le ocurría, porque ya no estaba tan enamorado de James como creía y lo que sentía por Louis era mucho más fuerte de lo que pensaba.

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