Abismo

Capítulo 11

-¿Qué?- Dice un poco confundida.

¿CÓMO VAS A DECIR ESO? NANANA TARADO NACISTE NO TE HICISTE.

Entré en pánico.

HACETE EL DORMIDO.

-¿Shawn?- Dice Skay nuevamente, esperando una respuesta.

-Tienes sabor a fresa en los labios.- Digo balbuceando, simulando estar dormido.

Skayler suelta un suspiro de alivio y sale de la habitación.

-¿QUÉ CARAJO TE PASA?- Le pregunto a mi conciencia.

-¿QUÉ CARAJO TE PASA A VOS? ¿CÓMO MIERDA SE TE OCURRE DECIR "TINIS SIBIR I FRISI IN LIS LIBIIS"? ¿ESTÁS ENFERMO?

-¿Estuve mal?

-PERO CLARO QUE ESTUVISTE MAL: ARRUINASTE UN MOMENTO PERFECTO. Núnca me cansaré de decirte que eres un fracaso con las chicas. Bueno, er...

-"Eres un fracaso en todo". Lo sé, lo sé.

Ya nos vamos entendiendo, Shawnie...

(...)

Luego de dormir unas horas, entra un doctor en la habitación, con unos papeles en su mano.

-Mendes.

-Hola, doctor.- Digo con tono cansado.

-Pareces cansado muchacho ¿Estás bien?

-Sí, sólo no he tenido una buena noche ¿Sabe que hora es?

-Son las - mira su reloj- 14:45 ¿Cómo te sientes?

-Uhmm, bien, creo. No me duele nada.

-¡Perfecto! Vendrán unos medicos a hacerte un chequeo y si todo está en orden, puedes volver a casa.

Asiento en modo de respuesta.

-¿Tienes hambre? Puedo llamar a alguien para que te traiga el almuerzo.

-Sería genial, gracias- Digo sonriendo.

(...)

Luego de comer y que me revisaran los médicos, me dieron el alta, tomé mis cosas y salí del hospital.

Freno en una cafetería, pido un cortado con unos muffins y me pongo a pensar en todo lo que estaba pasando.

-Me salvó la vida.- Digo para mis adentros.

Si ¿Pero qué festejas? ¿El plan no era mori?

-Pero ella no lo sabía, salvó mi vida.

NO SALVÓ TU VIDA, ARRUINÓ TU MUERTE ESO ES LO QUE HIZO.

Ignorando el comentario estúpido de mi conciencia, voy camino al campus; quería llamar a Skay pero mi teléfono estaba sin batería.

Una vez que llego al campus, pude percibir la mirada de todos, como todos miraban la muñeca con vendas.

-Miren, llegó el niñito dramático.- Pude escuchar que Parker decía a mis espaldas, mientras su grupito de imbéciles se reía.

Decidí ignorarlo, no quería tener problemas otra vez.

-¿Mendes?-Dice el director, mirandome extrañado.

-Hola señor Caniff.

-¿Qué haces aquí? Deberías estar en tu casa.

VACACIONEEEEEES.