«Te encontraré...» (Genji x Mercy - Gency) #2

Llegaré a ti «Prólogo»

Mercy observaba, desde lejos, el sufrimiento de Genji, sin poder hacer nada, ella no quería que esto pasara.

Genji se encontraba sentado en su habitación, con la cabeza baja, observando el collar que Mercy le había dado como regalo.

«Esto nos unirá en cualquier lugar en donde nos encontremos»

-Genji, ¿No quieres comer?

Genji no respondío.

-Genji...-

Tracer fue interrumpida por Gabriel, quien le tocó el hombro y le negó con la cabeza, como diciendole que le dejara tranquilo, después, ambos se retiraron.

Mercy solo podía lamentarse, ella nunca imaginó que esto pasaría, pero, mientras observaba, logró ver que Genji aún conservaba aquel collar.

Mercy soltó una lágrima, que calló en su collar y lo hizo deslumbrar.

-¿Pero que..? -En ese instante, ambos collares brillaron, dejando ver, justo en frente del muchacho, un fuego amarillo, el alma de mercy.

Al verla, Genji se acercó y aproximó su mano a aquella alma, para después, decir aquellas palabras que solo Mercy había dicho.

«Los héroes nunca mueren»

La habitación se cubrió en un color amarillo, que envolvia de calides a Genji, mostrando en cada brillo un recuerdo junto a Mercy, estos recuerdos avanzaban poco a poco, hasta cubrir toda la habitación, y cuando esto ocurrió, frente a Genji, se mostró Angela, con un vestido blanco y el cabello suelto.

-Genji... -aquellos ojos azules se cruzaron con los de Genji, el cual no fue capas de pronunciar ninguna palabra, pero bastó con acercarse a Angela y darle un dulce beso, algo que, el pensó, nunca volvería a hacer.

Los collares se rompieron, pero consiguieron el objetivo para el cual estaban echos, unir a dos personas en donde sea que se encontraran.

Genji no sabía como es que Mercy se encontraba ahí, pero ahora lo único que le importaba era que su amada había vuelto, y no le dejaría ir otra vez.

De los ojos de ambos se escapaban lágrimas, lágrimas de alegría al sentir la calidez del otro.

Habían pasado un par de meses desde lo ocurrido en aquella misión, meses vacios y sin importancia para el muchacho, que solo sintió que con cada día que pasaba, algo en el se iba desgarrando.

Pero todo eso, desapareció, bastaron unos segundos para que la alegría volviera a ser parte de Genji, para que volviera a sentir lo que es estar vivo, para al fin, poder volver a saber lo que es amar.

Poder volver a ver a Mercy.

Bueno, les prometí que haría una segunda temporada y aquí la tienen, espero que les guste tanto como la primera, disculpen si este capitulo es algo corto, pero apenas es el prólogo, no se desesperen xD ¡Gracias por leer!