DESTINOS CRUZADOS

20

– La. ¿Estás bien? –Preguntó Mon-

-Si –dije mirando el balcón –iré a tomar un poco de aire, permiso-

La noche estaba hermosa pero no podía disfrutar como corresponde con el millón de preguntas que tenía en mente, quería estar en Mar del Príncipe con una copa de vino a la orilla del mar.

-Quiero pedirte perdón –miré y estaba Peter- jodí tu noche, tenía que a verme negado hablar, siempre hacen las mismas pregunta, no tengo nada con ella, no la he visto desde que cortamos, si estoy con vos es porque ella ya no está presente en mi -¿debo creerle?- no te miento ni lo haría jamás, no tengo nada que ver con ella –asentí- te quiero Lali, solo a ti –mi corazón saltaba por todas partes- ¿Puedo besarte? –Asentí, sonrió acercándose, puso sus manos en mi cintura y me besó – sólo a ti- dijo separándose un poco- ¿Escuchaste? –asentí y lo bese-

-Yo igual te quiero –dije sonrojándome – si tienes dudas de nosotros, dime por favor voy a entend.. –me interrumpió besándome –

-No tengo ninguna duda La-sonreí, confiaba en él solo espero no equivocarme, estuvimos un buen rato besándonos sin importar que estaba nuestros amigos adentro –

-Amo su demostración de amor –dijo la china desde el ventanal- pero Mon tiene un vuelvo a las 9 de mañana y ya son la 1 de la madrugada, asentimos y entramos –

Nos despedimos de Benja y Eugenia en el restaurant, Peter nos iba a dejar ya que en la mañana habían pasado por nosotras entonces no andábamos en el auto.

Peter subió con nosotras, decía que era por seguridad

-Estaré de vuelta la próxima semana, pero si llegas hacerle alg..

-Mon –dije- ya entendió- Peter solo sonreía- ¿Por qué mejor no vas a dormir? Iré a dejar a Peter a la puerta- sonrió y lo abrazó- cuídense, cuídala por favor –le decía- conózcase, se tienes que sanar mutuamente –lo soltó y me miró- no dejen que nadie daño lo que están formando –quería llorar, la iba a extrañar un montón- buenas noches –y se fue a su cuarto-

Con Peter estábamos en la puerta "organizando lo que haríamos en unas horas más" – te tenes que dejar sorprender –decía- pedí el día completo para estar solitos –me dijo dándome un pequeño beso- como dijo Mon tenemos que conocernos –asentí- entonces paso por ti a las 12 –me abrazó- buenas noches La, que gana de quedarme ¿no queres que me quede? –dijo sonriendo, negué-

Buenas noches Peter- me besó y se fue-

Pasé por el cuarto de Mon pero ya estaba durmiendo, estaba con una felicidad que nunca antes había sentido, por fin todo estaba volviendo a la normalidad, ya no estaba esa angustia, Ni siquiera pensaba en ese día, todo gracia a Peter y los chicos.

La despedida la sentí como si no la viera por un tiempo muy largo, y sólo era una semana sin Mon, la extrañaría un montón, el departamento era muy grande para mi sola pero un poco de soledad no me haría tan mal, estaba por entrar a la ducha y sonó mi celular al mirar era mi madre

-Aló mamá –dije

-Mi amor, ¿Cómo estás? Estoy camino al aeropuerto a buscar a mí otra bebita –reí-

-Bien extrañándote un montón, ¿Cómo van las cosas por allá? –no sé porque pregunte, no quería saber nada de ellos –

-Todo tranquilo –fue lo único que dijo, pasaban los segundos y no decía nada ¿habrá pasado algo?- hija sé que estas en un momento muy tranquilo para ti, pero necesito preguntarte algo

-Dime mamá-

-¿Qué harás con tu casa? –con toda la locura que estaba viviendo aquí, había olvidado que tenía una casa, la casa que siempre había soñado pero se convirtió en mi peor pesadilla- mi amor, entiendo si quieres hacer tu vida allá o en el lugar que quieras, siempre te apoyaré –

-Lo sé –dije

-Trabajaste un montón para tenerla pero entiendo que tienes esa imagen e ¿Qué quieres hacer de tu vida ahora? – estaba viviendo el día a día, mi relación o lo que tenga con Peter estaba recién comenzando tenía dudas de lo que hacer con mi vida, lo único que tengo en mente es quedarme aquí,  y estoy completamente segura es que esa casa ya no es mi hogar -¿sigues ahí? –habló mamá-

-Sí, estaba pensando que ya no es mi hogar, es mejor ponerla en venta, no sé si me quiero ir de aquí mama

-¿es por alguien? –no podía mentirle

-Estoy conociendo a un chico –dije nerviosa- no sé qué pasará más adelante pero por ahora quiero intentarlo, si no resulta tampoco me gustaría volver a esa casa mama

-Mi amor que felicidad saber que te estás dando esta oportunidad en el amor –decía emocionada- pensé que te cerrarías para siempre –pensaba lo mismo- necesito conocerlo ¿Mon lo acepto? –reí- no sabes lo feliz que soy con esta noticia

-Tampoco te emociones mamá, estamos conociéndonos de apoco a lo mejor no resulta

-No sabremos lo que pasará el día de mañana, pero hoy con tan solo saber que te estás dando estaba oportunidad me hace feliz, estoy muy orgullosa de ti mi amor

-Gracias –dije emocionada- te extraño tanto mamá- empecé a llorar- odio a verme ido, pero...

-te extraño también, pero sé que aquí no estarías haciendo todo lo que haces en Argentina, estoy llegando por Mon, antes de cortar hablaré con patricio para que vea el tema de la casa, cualquier cosa que quieras decirme dime, no pienses que me dejaste solita aquí, piensa en sanar tu corazón y volver a amar, adiós mi vida-

Coloqué música y comencé a ordenar el departamento, organizar el placar para nada difícil era ¡GIGANTE! Con mi ropa y la que me regaló Eugenia aún quedaba lugar, terminando con mi ropa fui a ver el tema de alimentos tendría que hacer una lista e ir al supermercado, ordene hasta que sonó el timbre ¿Quién será? Pensé ¡MiERDA! Miré la hora 12 en punto, estaba en bata solamente volvió a sonar tendría que ir abrir así.

-¿Olvidaste nuestra primera cita? –dijo completamente serio ¡me quería morir! –

-Lo siento –dije- hablé con mi madre luego ordené el desastre que tenía entonces se me pasó la hora –asintió y entro cerrando la puerta- ¿estas molesto? –Se acercó a mí- lo siento de verdad yo no quis... -me interrumpió besándome- ¿me perdonas? –asintió y volvió a besarme, estuvimos un buen rato hasta que volvió a sonar el timbre?

-¿Esperas a alguien? –pregunto colocando sus manos en mi cintura

-No, ¿a quién? –Reí- no quedé con Eugenia ni nada –cuando abrí me encontré con Marianella Rinaldi ¿es broma?....