Solía ser la chica buena

¿Qué seamos qué?

Hablando con James en mi habitación surgió todo:

- Quiero que tengamos algo, algo de verdad- dice James.

- ¿De qué hablas James?

- De estar juntos, como... Como una pareja.

Al ver que yo no parecía convencida, agachó la cabeza. Me siento a su lado:

- ¿Quieres que nos pongamos serios?

- Te quiero Alexa, creo que nunca sentí esto por alguien... Quiero llevarte por todos lados presumiéndote, quiero que llevarte a casa orgulloso...

- Sabes que vivimos en mundos diferentes, nunca van a aceptarme en tu casa.

- Cuando eras amiga de mi hermana lo hacían.

- Pero cambié, ahora soy como mis padres, no puedo...

- Claro que puedes.

Él me mira fijamente, siento un cariño muy especial hacia él:

- No sé si es la clase de cariño que te tengo...- digo.

- Bueno, podemos salir y luego ver si surge algo, ¿no?

- Podemos- digo no muy convencida.

- Prometo que no va a faltarte nada.

Sonrío sin saber que contestar, me levanto y me acerco a la puerta:

- Te quiero- digo antes de salir.

- Yo a ti- dice él.

Al parecer James va a quedarse un poco más en mi habitación terminando de ver el vídeo de "Caso misterioso" que habíamos iniciado hacía pocos minutos, mientras yo tomo mi mechero para salir a fumar. 

Cuando abro la puerta me llevo por delante a alguien: Randy.

¿Qué hacía? ¿Acaso oía nuestras conversaciones? 

No le pregunto nada y me voy hacia afuera. Cierro la puerta detrás de mí, pero a los pocos segundos, Randy la abre:

- ¿Me prestas tu encendedor?

- Sí- dije cortante.

- Alexa, yo...

- No hace falta que digas nada Randy... O bueno, mejor sí, respondeme... ¿Estabas escuchando nuestra conversación?

- No... bueno, sí. Vine a hablar contigo pero no te encontré y cuando escuché la voz de ese idiota dentro de tu habitación quería entrar a romperle la cara, pero preferí quedarme escuchando... 

- Obviamente no tengo que decirte nada, sabes que no deberías escuchar detrás de las puertas.

- Lo sé... Ahora necesito borrar lo que oí. No puedo creer que quieras a ese tipo...

- ¿De qué hablas?

- ¿No te das cuenta de cómo habla? No le importas, quiere usarte como un trofeo, quiere presumirte... Yo no haría eso, yo te quiero por lo que eres, porque me gusta estar contigo, no por lo que tengo.

- No te metas Randy, que entre tú y yo no hay nada.