Matrimonio [ADAPTACIÓN]

Capítulo 11

Sungyeol paso con delicadeza su bálsamo de durazno por sus labios haciendo que estos resaltaran más y brillaran levemente. Con sus dedos acomodo sus cabellos y deslizo la bata blanca por completo quedando completamente desnudo. Observo su cuerpo con una leve sonrisa al notar como por primera vez en tantos años su piel se encontraban completamente limpia y sin rastro de algún golpe, sus clavículas se marcan y sus lunares resaltan en su blanquecina y suave piel

El castaño solo podría repetir "gracias" en su mente con la figura de Myungsoo en ella. Sungyeol soñaba con él, pensaba en él y preguntaba por él, como si el pequeño estuviera enamorado de aquel pelinegro. Sungyeol amaba abrazarlo y asentir su aroma tan varonil inundando sus fosas nasales, amaba besar sus mejillas para sentir sus hoyuelos cuando sonríe o lo cursi que Myungsoo llegaba a ser con él

Sungyeol estaba cayendo en las redes de Myungsoo

Sungyeol no sabe que es estar enamorado

Sungyeol quiere entregar su corazón a Myungsoo, porque él ha dejado todas sus esperanzas en él. Sungyeol piensa que él le sacará de ahí que le dará una mejor vida y le hará sentir completo

Ya era tarde, sus ojos pesaban y bostezos se escapaban de sus labios. Con sus manos restregó sus ojos y empezó a bajar las escaleras mientras se tambaleaba por el sueño. Vio como sus padres se encontraban ya en la mesa platicando con energía riendo y tomando una copa de vino, los adultos al mirar a su hijo guardaron silencio y se colocaron serios al instante

Sungyeol se sintió rechazado en ese momento

—buenas noches...— murmuro en voz baja para luego tomar asiento al frente de sus padres

—buenas noches hijo ¿podrías esperar un rato para cenar? — dijo el señor Lee con una sonrisa. Su esposa le miro confundida al igual que Yeol ya que no esperaban ninguna visita —hoy nos acompañara el hijo de los Kim a cenar y seria de mal gusto empezar sin el invitado

—¿Myungsoo? — la señora Lee se altero y miro con completo asombro a su esposo. Sungyeol bajo la mirada y sonrió al escuchar aquel nombre que tanta tranquilidad le causaba —pero él no pued...

El timbre solo llamando la atención de los tres presentes en la mesa, Sungyeol se levantó y se dirigió a su padre —yo le abriré— dijo con nerviosismo para dirigirse a la puerta

Sungyeol no pudo evitarlo, apenas giro la perilla y visualizo a Myungsoo este se lanzó a abrazarle. El mayor sonrió al instante y le correspondió, admirando como los pequeños brazos de Sungyeol le rodeaban la cintura y su rostro se ocultó en su pecho —buenas noches conejito— susurro en su oído mientras acariciaba con dulzura su cabello castaño

—no viniste a verme hoy, te extrañe— murmuro tímido y ocultando un gran sonrojo en el pecho de Myungsoo aun sin separarse

—lo siento pequeño, la empresa me necesitaba, pero ya estoy aquí— Yeol sintió como Myungsoo besaba su frente con dulzura mientras el asentía tímido

—¡¿Por qué tardas tanto, Sungyeol?! — se escucho una voz femenina dentro de la casa por lo que Yeol se separo del mayor con rapidez con el miedo de que su madre los viese así. Myungsoo revolvió su cabello y entro junto con el menor el cual le acompaño donde todos se encontraban —Sungyeol, ¿podrías irte a tu habitación? luego te llevare la cena si así lo deseas— soltó mirando a la pareja que entraba en el gran comedor

—Yo...q-que tengan buena noche— hizo una leve inclinación a punto de salir de así. Myungsoo tomo su mano y le detuvo. Contuvo las ganas de reír al ver la reacción de la mujer frente ellos

—vamos, él no tiene por qué irse. Que se quede ¿no cree señor Lee? — miro burlón a la madre de Sungyeol, esta fruncía el ceño y golpeaba la mesa con sus dedos tratando de tranquilizarse