Caminar de tu mano

Capítulo 24.- Por fin, la verdad

Llegada la noche y luego de terminar una agotadora jornada de trabajo me dirigí a casa, mientras iba en el autobús pensaba en todo lo que me tenía que decir Marco, ¿Qué escondía? ¿Por qué no me lo había dicho antes? Esas preguntas rondaban mi casa, al llegar a casa vi las luces apagadas, lo primero que pensé fue que Marco había salido pero al acercarme pude ver que la puerta estaba un poco abierta, un escalofrío recorrió mi cuerpo pero aun así entré, al entrar encendí las luces y vi a Marco sentado en el suelo de la sala con una botella en la mano.-

Ya... Llegue.- dije mientras me acercaba.- Amor ¿Qué pasa?

Sabo.- dijo Marco mientras sonreía.- Ven, bebe conmigo.

Sabes que no soy así.- dije molesto.- Dame eso.

Al quitarle botella a Marco él aprovechó para lanzarse sobre mí, al caer al suelo comenzó a besarme y metió su por debajo de mi ropa.-

Marco, no.- dije mientras trataba de quitarlo.- Estas ebrio.

Al ver que no hacía caso lo golpee con toda mi fuerza y lo aleje, al ver a Marco tratando de levantarse me puse de pie y fui por un vaso con agua.-

Sabo, perdón.- dijo Marco sentado en el suelo.- No quise asustarte.

No me asuste.- dije al acercarme a él.- Toma bebe un poco de agua.

Perdóname.- repetía Marco.- Perdóname Ace.

Le quite el vaso y le arroje el agua a la cara, y me dirigí a la habitación, Marco trató de seguirme pero apenas podía caminar, me encerré en mi cuarto y me fui a dormir, al llegar la mañana desperté y trate de no estar molesto con Marco.-

Muy bien Sabo.- dije mientras salía de la cama.- Vamos a ver a ese borracho.

Al salir de la habitación vi a Marco dormida al pie de la escalera, al verlo no pude evitar reír.-

No puedo enojarme con un hombre que duerme en el suelo.- dije mientras bajaba las escaleras.- Veamos por qué acabaste con la reserva de alcohol de Shanks.

No pasó mucho para que Marco despertara, al darse cuenta donde estaba se puso de pie rápido y al verme solo se quedó ahí mirándome esperando a que hablara.-

Marco ¿Sabes que paso anoche?- pregunte sentado al pie de la escalera.

Dime que lo que paso tu querías que pasara.- dijo Marco al acercarse a mi.- Perdóname, no quería herirte, prometo no volver a hacerlo y ¿Por qué me duele el rostro?

Ya que te disculpaste te diré.- dije mientras lo tomaba de la mano.- Trataste de obligarme a tener sexo mientras estabas ebrio y yo te golpee.

¿No golpeaste a Doflamingo pero si a mí?- preguntó Marco.

No compares a ese hombre contigo estando ebrio.- dije molesto.- Ven, vamos al cuarto.

Sabo, yo...

Te embriagaste pensando que así podrías decirme la verdad.- dije mientras subía las escaleras.- Por cierto, me llamaste Ace.

Marco se detuvo y al voltear a verlo lo vi preocupado.-

Ven, no estoy enojado, supongo que recordaste a Ace ya que te bebiste el regalo de Shanks.- dije al señalar las botellas vacías.- Te matara.

Sabo

Vamos, báñate, desayunemos y vamos a hablar.- dije mientras me acercaba a él.- No te salvaras.

Me duele la cabeza.- dijo Marco.- Supongo que me lo tengo merecido.

Ya bañado y desayunado Marco se fue a sentar al sofá mientras que yo sacaba una botella de vino y dos copas.-