Una pequeña visita

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Hermione se revolvía en la cama, casi desesperada. Estaba llena de sudor, y tenía cara de pánico. Se estiraba tanto, tratando de liberarse de algo que sus extremidades tronaban.
A pesar de todo, mantenía silencio, no gritaba para nada, por ese motivo nadie sabía lo que pasaba en esa habitación.



Caminaba por el pasillo, sus pisadas retonaban en la soledad y el silencio que extrañamente había, no tenía idea de que pasaba pero quería que así fuera siempre. Cargaba una charola con comida. Podía haber esperado que las enfermeras la llevaran a la cama pero era muy temprano y ella aún no despertaba, se levanto dejándola dormida, no quería dejarla sola pero se repetía que sólo era por unos minutos, necesitaba estirarse, nada malo le podía pasar, ¿o si?

Llevaba sólo un pantalón negro y una camisa de vestir blanca, no quería acostumbraste, pero sabía que estarían buen rato ahi.

Por más que quería llevarle su comida favorita, en san mungo eran conocidos por ser estrictos en su régimen alimenticio como en los tratamientos, (Aunque en ese creía que eran inútiles, no veía mejoría en Hermione) así que ahora le llevaba el desayuno especial que se le preparaban a cada paciente de acuerdo a sus necesidades.

Abrió la puerta y casi suelta la charola al ver a Hermione, su mandíbula tensa y apretando sus dientes, sus piernas y brazos doblados como queriendo ahuyentar algo, su cabeza se movía frenéticamente de lado a lado.
Dejó la comida en la mesa más cercana y corrió, no sabía si estaba soñando o si era un ataque, pero se iba por el sueño.

Severus:Hermione- llego a ella y la tomó de los hombros para que se dejara de mover.- despierta. Por favor.

Aún bajo su agarre forcejeaba

Severus:Hermione-habló más alto y la movió un poco. Miro su cuerpo demacrado, sentía que con cualquier toque podía hacerle daño, cuando volvió su mirada a su cara en ese instante abrió sus ojos, vio miedo, su respiración agitada y entrecortada era lo único que se escuchaba, aflojo su agarre completamente, ahora sólo la estaba tocando débilmente.
Hermione:qué.....
Severus:tuviste una pesadilla....¿estás bien?
Ella asintió y colocó una mano en su cabeza
Hermione:no lo recuerdo.

Severus la veía, analizándola, parecía contrariada y confundida. No era raro que alguien despertara y se le olvidará lo que soño, pero por como se vía que era la pesadilla uno pensaría que la tenía que recordar porque la tenía que recordar.
Tomó sus manos, las uñas de la izquierda estaban rotas y levantadas por rayar la mesa de madera. Hermione veía su mano, sorprendida, de verdad no creía que se hubiera puesto tan mal y no recordarlo.
Con un pase de la mano de su esposo sobre la propia volvieron a la normalidad sus uñas.
La inspeccionó nuevamente para ver si se había lastimado algo más.
Hermione:estoy bien....creo que sólo fueron mis uñas....Gracias.
Él asintió serio.
Severus:te traje el desayuno.
Hermione:oh, gracias.- se impulsó para recargar la espalda en la pared y quedar sentada, mientras él iba por la charola.
La dejó en la mesa y levanto la tapa, había gelatina, leche, sandia, melón y papaya picada, y una pechuga de pollo con ensalada.
Severus apareció una silla y se sentó a lado de la cama.
Hermione toma la cuchara y tomó la gelatina, después de estar 10 minutos con ella en las manos y llevar sólo la mitad Severus rompió el silencio.
Severus: no tienes hambre ¿verdad?-levanto su ceja.
Ella negó y dejó el envase en la charola.
Severus:¿en qué piensas?
Hermione:en nada....bueno....creo que en todo y en nada, ¿sabes?
Severus:....claro........tienes que comer más, necesitas fuerza y lo sabes.- hablaba calmado y lento, pero demandante.
Hermione:no tengo apetito.
Severus:son los efectos secundarios, ya pasarán.- se levanto y se sentó en la cama.- no puede ser tan malo, esta comida no se ve tan mal.
Sabía que trataba de animarla, siempre lo hacia, y se lo agradecía infinitamente. Hermione se  acercó hacia él y lo abrazo, él pasó su brazo por su espalda y la rodeó.
Hermione:¿ya desayunaste?
Severus:tome un café.
Hermione:eso no es desayunar
Severus:en cuanto acabes el tuyo lo haré.- dijo mientras tomaba el plato de fruta y se lo tendía 
Ella soltó algo parecido a un gruñido y lo tomó, Severus sonrió y beso su frente mientras la veía comer.

Te salvaréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora