Recibí el día con un beso de Dimitri en mi frente. Acostados en el suelo únicamente con una sábana cubriéndonos, era sin duda alguna, la experiencia mejor vivida en mis casi veinte años.
Dimitri acarició mi cabello mientras besaba su rostro deliberadamente. Decidimos levantarnos y vestirnos para que mi madre no nos encontrara de esta manera.
Horas después bajó Elizabeth de la habitación junto a Tommy, revisaron la despensa pero en ella había nada que comer lo que nos llevó a buscar las llaves para desayunar en la calle, sin embargo, no pudimos salir debido a la visita de unos sujetos que trabajaban para el gobierno, uno de ellos trataba del hombre que ayer acompañaba a mi madre.
—El presidente está considerando el paso libre de los hiperdotados—dijo—Si llegan a conseguir la manera de destruir el dispositivo pueden tener la posibilidad de venir las veces que quieran, mientras deben irse. Excepto tú, Elizabeth—resopló—Lo siento Eli, no logré disuadirle.
Dimitri hizo un mohín y se dirigió a la entrada, acto que me hizo tirar de su camisa para detenerlo.
—No, tú no te vas.
Los gritos desgarradores fueron escuchados en toda la cuadra. No lo soportaba, sentía como si me hubiesen quitado una parte de mí. No fue en poco tiempo, Dimitri y yo estuvimos conectados desde que nacimos.
Nunca dejamos de estar juntos, mi mente pudo olvidarlo pero mi corazón jamás lo hizo. No me iba a permitir borrar su imagen una vez más.
Golpes, patadas y mordiscos sufrió el guardia quien bloqueaba el paso en dirección a la salida.
Me lancé al suelo con las manos en el rostro, no lo aguantaba. Apenas había experimentado algo tan maravilloso, un sentimiento que me completaba para que me lo quitaran así, sin piedad ni una pizca de misericordia.
—Adiós Dimitri. Nos encontraremos, posiblemente, en otra vida.
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Tentación Prohibida.
Misterio / SuspensoElla lucía débil ante cualquiera, sus ojos grandes y brillantes dejaban ver en su alma el sufrimiento que la atormentaba a diario, los problemas se acercaban con cada respiración que daba, indefensa ante un mundo lleno de mentiras y daños Patrice Ha...