Confesiones

Final

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-¡Tsukki! ¿Por qué no me dijiste que me quedara contigo? Tu madre y Akiteru se irán estas vacaciones y te quedarás sólo, podía hacerte compañía.

-No creí que a tu novio le gustara eso. -gruñó en respuesta.

- ¿Y eso qué? Tú eres mi amigo y eso me importa más.

-Que no te escuche decirlo o me odiará aún más.

-Cómo si eso te molestara. -Reviró los ojos y Tsukishima sonrió en respuesta-. Además, ya no estamos juntos…

El rubio volvió su atención al chico.

- ¿Porqué? ¿Y por qué no me lo habías dicho?

-Has estado ocupado con las cosas de la universidad…

- ¿Y tú?

-Por eso terminé con él…

Tsukishima lo miró escéptico hasta que hizo sentir incomodo al pecoso.

-Está bien. -gruñó-. Discutimos…

-Oh, que extraño... -dijo con sarcasmo-. ¿Por qué esta vez?

Yamaguchi emitió un sonido de auténtica molestia.

-Le dije que iría a la universidad de Osaka y se molestó porque cree que tomé esa decisión sin pensar en él…

-Oh… ¿Y lo hiciste? ¿Pensaste en él? -inquirió, enarcando una ceja.

-No en realidad… -gruñó más fuerte-. Pero ese no es el punto.

-Está bien, discutieron porque él te reclamó que no pensaste en él cuando decidiste la universidad a la que irías, lo cual es cierto.

-Pero esa no fue la razón por la que terminamos. Él me dijo… me dijo que ni siquiera debería intentarlo porque no permitirían que un chico gay se graduara en medicina, y que menos aún me permitirían especializarme en pediatría…

Mientras hablaba su voz temblaba con coraje reprimido, mientras la expresión de Tsukishima cambiaba de su usual fastidio a una que podría delatarlo como asesino serial.

-Es un idiota. dijo Tsukki finalmente; necesitaba mostrarse sereno para apoyar a su amigo y un ataque de rabia no le ayudaría a hacerlo sentir mejor, así que se calmó tanto como pudo y dándole una palmadita en el hombro le obligó a voltear hacia él para atraparlo en un abrazo-. No dejes que un estúpido acomplejado te diga qué puedes hacer o no.

-Tsukki…- murmuró contra el hombro de su amigo.

-Siempre me ha parecido un idiota que no te merece…

Y sí, lo era. Recordaba un par de ocasiones donde el tipo había tenido un ataque de celos y le gritó frente al gimnasio que cuál de los chicos era con quien le engañaba. Yamaguchi salió avergonzado a callarlo, y cuando Tsukki salió detrás con intenciones de golpearlo hasta hacerlo callar, Kageyama y Hinata se lo impidieron; una pelea entre ellos dos no iba a mejorar la situación para Yamaguchi.

-Nunca te agradó… -Rio a medias dejándose abrazar por su amigo.

-Por supuesto que no, te hace llorar más veces de las que te hace sonreír.

La segunda vez que les vio pelear por algo realmente absurdo y Yamaguchi entró llorando al gimnasio, intentando sin éxito que nadie le viera, Tsukishima simplemente salió sin decir nada directo a darle un puñetazo en el rostro al tipejo, quien molesto le gritó que dejara de ser hipócrita y aceptara que estaba enamorado de Yamaguchi -claro, en palabras no tan amables-.