It's Her [Frerard]

🍂 CATORCE 🍂

Siempre hay alguien que cuida de ti

Gerard tenía miedo, un miedo que le hacia temblar y sudar las manos que aumentaba cuando Frank estaba cerca.
Llevaba dos días en ese lugar y ya había intentado de todo para salir. Pero el maldito lugar parecía una jaula. Una horrible y sucia jaula.

Por su parte Frank amaba más a esta Grecia y verla nuevamente era lo mejor. No la dejaría escapar nuevamente.

—¿Tienes hambre? —preguntó Frank mientras miraba a Gerard sentado en la "sala".

—No, quiero irme —contestó el pelirrojo sin mirarlo.

Frank suspiró, dejando a un lado todas las cosas que tenía en las manos y mirando con desaprobación a Gerard.

—Mi cielo, ya te dije que no volveré a dejarte ir. —chasqueó la lengua y se adentró en la cocina o lo más parecido a una— ¿Te preparo un té?

—Mejor abre la puerta.

El sonido de algo romperse asustó a Gerard. Frank había azotado una taza en el suelo. Demostrando la furia que tenía atrapada.

—¡Ya te dije que no te irás! ¡Coopera maldita sea! —gritó desde la cocina.

Por más que el pelirrojo trataba de entender, no podía. Solo quería salir de ahí y olvidar la locura de su cliente frecuente.

Intentó tragarse las lágrimas.

No había sido abusado, no habían llamado a algún familiar suyo, no le había maltratado a excepción del golpe en la mejilla.

¿En qué clase de enredo estaba metido?