🍂 VEINTICUATRO 🍂

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Dime la verdad hasta que sea real

Frank regresó a la cama, donde Gerard seguía sentando mirando sus pies. Sin decir nada lo levantó en sus brazos y lo llevó al baño. Lo sentó en la tapa del inodoro y comenzó a desvestirlo. Quitándole el sucio y roto vestido.

El pelirrojo no había dicho nada, ni siquiera lo miraba, simplemente se dejó llevar. Se sentía cansado, adolorido.

Reprimió un quejido al ver los moretones sobre su cuerpo y quiso llorar aún más.

—Abrázame —ordenó Frank y Gerard enredo sus brazos al rededor de su cuello.

Lo dejó en la bañera, sumergido en agua caliente y esencias, Frank comenzó a limpiarlo.

—¿Por qué yo, Frank? —preguntó Gerard.

Los ojos avellana del muchacho se posaron en los de Gerard. No entendía a lo que se refiera su novia, por lo cual solo pudo decir;

—Porque te amo, Grecia.

Gerard apretó la mandíbula y cerró los puños sintiendo el coraje invadir su cuerpo.

—¿Cuántas veces tengo que decirte que no soy Grecia? Me llamo Gerard Way. Soy un hombre de pies a cabeza, soy el chico que conociste en la cafetería. No soy tu novia, no soy nada tuyo, tu novia está muerta ¿Por qué no lo entiendes?

Sus palabras habían sido como balas para Frank, las cuales se incrustaron en su corazón. Los ojos del pelinegro se cristalizaron, sintiendo un nudo en la garganta y sin decir nada, continuó bañando al pelirrojo.

It's Her [Frerard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora