Capítulo 10

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Las maletas ya estaban listas y los coches se encontraban estacionados delante del castillo para llevarnos al aeropuerto.
Aro y Jane se estaban despidiendo de nosotros.

— Fue un placer tener a los Cullen en nuestro hogar —dijo Aro.

— Gracias por acogernos. Os mandaremos un mensaje en cuanto sepamos algo.

— Vampiros y Licántropos contra Magos, será interesante —dijo riendo Jane mientras me daba un abrazo de despedida.

— Gracias por todo Jane, sin ti me habría perdido por el castillo —reí y ella hizo igual.

— Ya es la hora de irnos —dijo Carlisle.


°°°


Llegamos a casa, ya estaba oscureciendo. Nessie y yo estábamos muy cansadas, llevábamos bastantes horas sin descansar correctamente.

Al estacionarse el coche delante de nuestra casa en Forks, salí y fui al maletero para coger mi maleta.

— Deja que lleve yo eso —dijo Jacob quitándome la maleta de las manos y llevándola como si no pesara nada.

— Gracias —sonreí y el me devolvió la sonrisa, esa hermosa sonrisa.

— Chicos, mañana entrenaremos —dijo Carlisle.— Emma ve a descansar, estos días han sido duros para ti.

— De acuerdo —suspiré.

Entré en mi habitación y me tiré a la cama quedándome dormida al instante.


°°°


Alguien llamó a mi puerta y yo desperté.

— Adelante —dije y la cabeza de Alice se asomó por la puerta.

— Dentro de poco entrenaremos, debes desayunar.

— Si ahora voy.

Me vestí con ropa deportiva y recogí mi pelo en una coleta alta, desayuné rápido y me dirigí al bosque, allí estaban todos.

— Buenos días —dije sonriente.

— Hola cariño —Rose me abrazó.

— Bien chicos, comenzaremos con un entrenamiento básico por parejas, luego todos en grupo para ver lo que puede hacer Bella para protegernos de la magia ¿De acuerdo? —dijo Carlisle y todos sentimos.— Pues comencemos.

Me tocó con Jacob, él me enseñaría cómo luchar sin mis poderes.
Comenzamos con algunos puñetazos y patadas.

— Lo haces muy bien Emma —sonreí.— Pero podrías hacerlo mejor.

— Hago lo que puedo Jacob —dije poniendo mis manos en mis caderas.

— Lo sé, ahora lucharemos.

— De acuerdo... —respondí.

Jacob puso sus puños delante de su cara de manera amenazante, yo hice lo mismo.

Al principio fueron algunos golpes y patadas que no llegaban a nada, pero la cosa se puso "seria".

Intenté pegarle un puñetazo, pero el lo esquivó y me dio un pequeño golpe en la cadera, gruñí y le di una patada en las costillas, esta vez no pudo esquivarlo, pero me golpeó la pierna.
Después él quiso darme un puñetazo, pero lo esquivé y le di un golpe en la pierna haciendo que cayera al suelo.

— ¡Lo habéis visto! —grité de alegría dándome la vuelta para ver a los demás.

La emoción duró poco, ya que Jacob me agarró del tobillo y tiró de él haciendo que cayera yo también al suelo. Se puso encima y me agarró las muñecas poniendo mis brazos encima de mi cabeza.

— Emma no des nunca la espalda a tu contrincante, y más si sólo le has tirado al suelo.

Me di cuenta de nuestra cercanía. Estaba encima mía y nuestras caras muy cerca.

— ¡Chucho! ¡Apártate de Emma! —gritó mi madre.

Jacob le hizo caso y se levantó para ofrecerme la mano y ayudarme a levantarme del suelo.
Estaban todos mirando, seguro que estaba roja como un tomate.

— Creo que ya es hora de probar tu magia Emma —dijo Carlisle.

Las siguientes horas estuvimos comprobando cómo podía Bella protegernos de la magia. Ella era muy poderosa, pero los brujos contra los que vamos a luchar mucho más.

— Podría hacer un hechizo para que no puedan utilizar algunos de ellos contra vosotros, pero necesito un libro de hechizos lo suficientemente poderoso como para poder hacerlo.

— ¿Cómo podríamos conseguirlo? —dijo Jasper.

— Conozco a un amigo... que podría conseguirlo.

— ¿Cómo? —preguntó Edward.

— Robándolo, pero sería muy útil para nosotros.

— De acuerdo, llama a ese amigo y que consiga el libro de hechizos —dijo no muy convencido Carlisle.

— Si, ahora le aviso —dije.

Aparté algunas hojas que habían caído de los árboles, cogí un palo que había en el suelo y comencé a hacer signos en la tierra. Después extendí mi mano encima de los signos y éstos comenzaron a iluminarse para después desaparecer.

— Wow —dijo Seth.— ¿Qué idioma era ese?

— Es secreto, sólo lo sabemos algunos magos.

— Eso fue increíble.

Al poco tiempo, en el mismo sitio donde escribí mi mensaje, apareció otro.

— ¿Qué dice? —preguntó Esme.

— Dice que mañana lo traerá.

— Tu amigo el ladrón es muy rápido.

— El mejor de los ladrones —reí.

Ahora sólo falta esperar a que venga Cam con el libro de hechizos.

°°°

¡Nuevo capítulo lectores!

En el siguiente capítulo os presentaré a Cam, el amigo de Emma. Seguro que os caerá bien, pero a Jacob probablemente no hahaha.

¡Nos vemos en el siguiente cap! 😘💕





LA HIJA DE ROSALIE || En Proceso...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora