-¿En que piensas?- Susurro mientras acariciaba mi pecho con la mitad de su cuerpo desnudo encima del mío.
Acabábamos de terminar nuestra larga sesión de sexo y me sentía en el aire.
-En ti...
Suspiró profundamente y levanto su cabeza para mirarme.
Sus ojos eran un mar café lleno de olas que pegaban fuertemente contra mi mirada, ella es lo mas bello que anhelo.
-Pero... estoy a tu lado.- Murmuro suavemente mientras colocaba su mano izquierda sobre mi cabello para acariciarlo.
-Lo se.- Sonreí.
Sus caricias se detuvieron y se inclino para besarme suavemente, como si de un simple roce se tratase, tan delicado como los pétalos de una flor.
La paz no duró mucho, el beso se volvía mas apasionado y su lengua navegaba por mis cavidades.
Coloque mis manos en su trasero y lo apreté fuertemente mientras me sentaba con ella en mi regazo, atrayéndola mas hacia mi cuerpo.
Separamos nuestros labios cuando el aire fue necesario y empece a besar y morder su cuello sin perder tiempo alguno, sus jadeos pesados en mi oído eran tan íntimos que me enloquecía el tenerla de esta forma.
Ella movía su centro contra mi miembro llenándolo de sus fluidos solo para penetrarse ella misma.
-Mmm.- Su mano subió por mi abdomen para tomar mi cuello y mantenerlo apretado.
-¿Respiras?- Me encantaba esa parte de ella, a pesar de estar caliente y actuar como una dominante, su lado de preocupación siempre sale.
-Ahh...s-si.- Susurré. El movimiento de sus caderas me estaba matando, lento pero confiado.
-Mmm Camz, por favor.- Dije con un tono de desesperación manteniendo mis ojos cerrados y el agarre fuerte en su trasero.
-Dime que quieres mi amor...- Susurró en mi oído, mordiendo levemente el lóbulo de este.
-Mas...- Trague saliva fuertemente. -Mas rápido.- Dije con la mandíbula apretada.
Ella me dio su típica sonrisa juguetona y empezó a moverse rápidamente casi saltando sobre mi.
El movimiento de sus caderas, el golpeteo de su trasero con mis muslos, sus pechos rebotando con los míos, los gemido y palabras sucias en mi oído fueron suficiente para hacerme venir en el quinto orgasmo del día.
-Lauren.- Dijo despacio mientras escondía mi rostro en su cuello.
-¿S-si?- Dije temblando levemente.
-Te amo
