Capítulo 35

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-Habla traidor, ¿cómo fue que pasó?-

-Ya te lo dije Lee, Bill salía con Fleur y ella me la presentó, salimos algunas veces, me gustó y se lo pedí- explicó Fred, se encontraba en el caldero chorreante con Lee, Alicia, George y Angelina, desde que se habían sentado el moreno había estado preguntando sobre su matrimonio con Elizabeth

-Estás escondiendo algo, en Hogwarts no dijiste nada sobre ella-

-No sabía si iba a funcionar en ese entonces, pasamos todo el verano juntos y me convencí-

-Pero ¿por qué tan rápido? por lo que dices no deben de llevar más de un año-

-Porque sí Lee- respondió Fred ya cansado- nos queríamos y con lo bien que nos está yendo en la tienda podía permitirme la boda-

-Fue una gran boda- comentó Alicia

-¿No será que hay un pequeño Fred en camino?- preguntó Lee con los ojos entrecerrados haciendo que George se carcajeara, si supiera que no le había puesto una mano encima...

-Claro que no Jordan y ya deja ese tema- respondió Fred mirando mal a su hermano

-¿Dónde está ella?- preguntó Angelina

-La hubieras traído- dijo Alicia

-Está en casa estudiando-

-¿Un viernes?-preguntó Lee

-Estudia para ser sanador- justificó George después de su ataque de risa- se la pasa leyendo todo el día-

-¿Te tienen abandonado?- se burló Lee a lo que Fred bufó- ya en serio la hubieras traído-

-Le dije que si quería venir estariamos aquí- respondió Fred

-Entonces tal vez la conozcamos

-Lo dudo, tiene un examen el lunes-

-Ya que está aclarado el tema ¿cómo les ha ido?- preguntó George intentando cambiar el tema, cosa que logró, pasaron el tiempo hablando sus sobre sus planes y recordando sus tiempos en Hogwarts, Alicia se tuvo que ir y Lee y George fueron a otra mesa a coquetear con un par de brujas que se encontraban solas dejando a Fred y Angelina en la mesa

-Dime la verdad Fred, ¿de dónde salió?-

-Ya se los dije-

-Hace un año salíamos-

-Fue hace más tiempo Angelina y si mal no recuerdo habíamos quedado en que lo nuestro no funcionaría- respondió Fred incómodo y se quedaron unos segundos en silencio

-Estuve todo el último año esperando a que fueras a arreglar las cosas-

-No soy ni era adivino- bromeó Fred intentando aligerar el ambiente

-Siempre te quise, cuando me pediste ir al baile me emocioné e intenté arreglarme lo mejor posible y después nuestras citas yo-

-Angelina-

-Recuerdo cuando me llevaste a Hogsmeade- siguió Angelina- y el día que nos escabullimos a la casa de los gritos a ver si realmente estaba embrujada-

-Las cosas no funcionaron por algo-

-Pudimos haberlo arreglado-

-No lo creo, por algo decidimos dejarlo-

-Tú lo decidiste- dijo Angelina con el ceño fruncido

-Y tú dijiste que estaba bien- respondió Fred cada vez más incómodo, quería irse de ahí

-Nunca me explicaste porqué-

-Me dí cuenta de que no te quería como pensaba, eras la mujer con la que mejor me llevaba y creo que confundí las cosas, siento mucho haberte hecho daño pero ya no hay nada que pueda hacer -explicó después de pensarlo unos segundos

-No, ahora estás casado- respondió Angelina mirando sus manos

-Y tú encontrarás a alguien-

-¿La quieres?- preguntó levantando su mirada hasta posarla en los ojos del pelirrojo

-Sí-

-Entonces... ¿podrías al menos darme un último abrazo?- preguntó Angelina y Fred le sonrió

-No tiene porqué ser el último, eres mi amiga- respondió Fred, se pararon y se fundieron en un abrazo que duró unos segundos

-Gracias-

-No es nada Angelina, pero creo que ya es hora de irme a casa- dijo Fred mirando un reloj que se encontraba en la pared

-Yo me iré a dormir, alquilé un habitación y pasaré la noche aquí-

-Supongo que está bien, solo ten cuidado- respondió Fred, se iba a despedir pero fue detenido por la morena

-Tenía un regalo para ti y George por el éxito de la tienda, acompáñame arriba, te lo doy y ya me quedó en la habitación-

-En serio tengo que irme, Elizabeth me está esperando- dijo Fred incómodo después de la confesión de su amiga

-No pienso hacer nada Fred ya entendí que la quieres, solo quiero darte el regalo- dijo Angelina con expresión amarga, Fred se lo pensó pero al final aceptó y subieron a la habitación de la morena por el regalo, minutos después bajó con una pequeña caja rectangular, se acercó a la barra y después de pagar la cuenta salió del local para ir a casa







Elizabeth entró a su casa molesta pero ella misma se reprendió, el pelirrojo y ella nunca habían hablado sobre fidelidad, mucho menos acordado que no tendrían otras parejas así que no podía enojarse ni reclamarle por su encuentro con la morena; media hora antes había decidido darse un respiro como le había sugerido Fred, se arregló y fue al caldero chorreante dispuesta a buscarlo, el problema fue que cuando entró lo encontró abrazado a una muchacha, no quiso interrumpir el abrazo así que esperó a que se separaran pero grande fue su sorpresa cuando lo vio subir las escaleras con ella rumbo a las habitaciones.

Su matrimonio era todo menos convencional y desde antes de dar el sí sabía que eso podría pasar, se había hecho la idea pero no tenía claro porque le dolía; su orgullo quería pensar... ¿por qué había decidido invitarla cuando estaría con la que aparentemente era su amante? también estaba la posibilidad de que fuera la primera vez que se acostaba con ella; decidió no darle más vueltas, Fred era bueno con ella y creía que dadas las circunstancias no podía pedir más, finalmente decidió pasar la noche fuera para poder tranquilizarse y no tener problemas con el pelirrojo, rápidamente subió las escaleras, tomó su pijama, un cambio de ropa y bajó llamando a su elfina

-¿Me llamó señora Weasley?- preguntó la elfina y Elizabeth sintió un hueco en el estómago ante la mención, en ese momento casi prefería que la hubiera llamado ama como solía hacerlo

-Sí, cuando venga Fred dile que fui a ver a mi padre y pasaré la noche ahí, regreso mañana en la tarde-

-Como diga mi señora- respondió la Lyann con una reverencia, Elizabeth agradeció y utilizando la red Flu fue a la que solía ser su casa, su padre aún no había vuelto como ya sabía pero fue recibida por Varick, su elfo, que después de que le ofreciera de comer y ella se negara la llevó a su habitación donde después de algunas horas al fin pudo conciliar el sueño abrazada al oso que su hermano le había regalado algunos años atrás







Fred entró a su casa encontrando a la elfina parada en la entrada de la sala, le extrañó pero decidió dejarlo pasar

-Hola Lyann ¿dónde está Elizabeth?-preguntó, esperaba que al ser fin de semana podría convencerla de dejar de estudiar un rato y así pasar tiempo con ella como había hecho anteriormente

-No se encuentra señor Weasley, le pidió a Lyann que le informara que fue a visitar a su padre y pasaría la noche ahí- respondió la elfina después de una reverencia

-Bueno, gracias- dijo el pelirrojo decepcionado y subió al cuarto donde tenían sus nuevos experimentos, sabía que al menos de momento no podría dormir así que decidió trabajar en un nuevo proyecto que tenía con su hermano

Nuestro castigo, su castigo : su boda (Fred Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora