Nuestro castigo, su castigo : su boda (Fred Weasley)

Capítulo 47

-¿Cómo sigue todo?- preguntó George

-Mal- respondió Fred dando un gran trago a su Whiskey de fuego. Los gemelos se encontraban en el departamento arriba de la tienda. Desde el día de la muerte de Dumbledore todo había sido muy duro; el mundo mágico en general, las heridas de Bill, el miedo por sus hermanos y amigos, la aprensión de su madre y lo de Elizabeth... ese día se había enterado de la Orden del Fénix por Fleur y no se lo había tomado nada bien; había llegado directamente a la enfermería donde se encontraban todos los Weasley después de haber recibido un patronus de su rubia amiga, preguntó sobre el estado de su cuñado para después tener una fuerte discusión con su marido pelirrojo, se encontraba preocupada, enojada y hasta cierto punto se sentía traicionada ¿por qué su marido no le había dicho nada?, ¿no confiaba en ella? no podía creer que se encontraba tranquilamente en su casa pensando que su esposo y cuñado se encontraban en la tienda como siempre cuando en realidad estaban a la mitad de una batalla con mortífagos, podrían haber muerto... eso y más le dijo al pelirrojo que no había sabido responder, su esposa furiosa y decepcionada se despidió de los Weasley para ir a su casa seguida por Fred pero cuando este llegó ella ya no estaba sino que se había ido a pasar un par de días a casa de su padre, regresó pero habían vuelto a sus primeros días de matrimonio, Elizabeth hacía horas extra en San Mungo y cuando no estaba en el hospital visitaba Fleur, incluso había salido un par de veces con sus amigos Carter y Viktor enfureciendo al pelirrojo, habían tenido grandes discusiones al respecto haciendo que Elizabeth se enojara cada vez más, al grado de dormir varios días en la habitación de invitados

-¿Por qué no le dijiste?-

-No sabía como se lo tomarían los demás y quería mantenerla alejada de todo esto-

-¿Y por qué no le dices? -

-Lo intenté, pero no me escucha... ya ni siquiera la veo, nunca está en casa-

-¿Irá mañana por Harry?-

-Sí, ella y Theodore irán- respondió Fred malhumorado terminando con su whiskey para servirse otro, George lo vio preocupado

-Has estado tomando mucho últimamente- señaló George recibiendo un gruñido de parte de su hermano que tomaba su whiskey con demasiada rapidez

-¿Quieres ir a la casa? así al menos no cenaré solo- comentó Fred amargamente, George asintió quitándole el vaso de la mano para guiarlo a la chimenea donde desaparecieron

Se aparecieron en la sala e inmediatamente Fred frunció el ceño al escuchar la risa de su esposa junto con una masculina en el porche; salieron y el pelirrojo enrojeció instantáneamente al ver a su esposa riendo con Carter, Elizabeth estaba en el sillón individual mientras que el castaño se encontraba sentado en la mesa frente a ella junto con dos copas de vino casi vacías. Su hermano intentó detenerlo pero se soltó bruscamente y tomó al castaño de la camisa poniéndolo de pie

-¡Fred!- exclamó Elizabeth levantándose molesta y sorprendida, sabía que su esposo era celoso pero nunca había sido agresivo

-¿Qué estás haciendo en mi casa con mi esposa?-

-Fred Weasley déjalo en paz- dijo Elizabeth tratando de separarlos sin mucho éxito, el pelirrojo no despegaba la mirada del castaño que lucía muy tranquilo enfureciéndolo más

-Quiero que te vayas de mi casa-

-No puedes hacer esto-

-Y no quiero volver a verte cerca de mi esposa, ¿entendido?- continuó ignorando a Elizabeth que comenzaba a golpearlo para que dejara a su amigo