Capítulo 57

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-¿Falta mucho?-

-No lo sé Lizzie, nunca había usado este túnel- respondió Fred apretando ligeramente su mano. Siguieron caminando en la oscuridad con Ginny, George, Lee y una chica asiática que le habían presentado como Cho Chang. Finalmente llegaron a unos escalones que daban a una puerta que abrió la pelirroja. Entraron a una enorme estancia. Había hamacas multicolores colgadas del techo y de un balcón que discurría por las paredes forradas de madera oscura, sin ventanas y cubiertas con llamativos tapices que representaban tres de las cuatro casas de Hogwarts; había estanterías llenas de libros, varias escobas apoyadas contra las paredes y un gran radio de caja de madera en rincón. Un gran grupo de lo que supuso eran estudiantes rodeaban a Hermione, Ron y Harry que los veían estupefactos.

-Aberforth está un poco mosqueado- anunció Fred alzando la mano libre para responder a los saludos de los chicos- quería echarse un sueñito, pero su bar se ha convertido en una estación de ferrocarril-

-Recibí el mensaje- dijo Cho mostrando un galeón, supuso igual al que tenían Fred y George.

-Bueno, ¿qué plan tienes Harry?- preguntó George.

-No tengo ningún plan- contestó el muchacho que lucía desorientado.

-Ah, entonces improvisaremos, ¿no? ¡Me encanta!- dijo Fred.

-¡Tienes que hacer algo para detener esto!- le dijo Harry a un chico de cabello negro y algo largo que tenía el rostro lleno de heridas- ¿Por qué les has pedido a todos que volvieran?¡es una locura!.-

-Vamos a luchar, ¿no?- dijo un muchacho de piel oscura- El mensaje decía que Harry había vuelto que íbamos a pelear. Pero tendré que conseguir una varita mágica-

-¿No tienes varita?- preguntó otro muchacho y ahí fue cuando Elizabeth se desconectó. Antes de que los gemelos recibieran el mensaje se encontraban de visita en casa de Fleur y Bill donde se encontraban también Remus y Tonks con el pequeño Teddy. El pequeño metamorfomago había cambiado su cabello a un brillante pelirrojo en cuanto estuvo junto a Emma, imitándola. A los adultos y Ginny les enterneció la escena hasta que a su rubia amiga se le ocurrió decir que tal vez estaban destinados a estar juntos. Su pelirrojo esposo frunció el ceño y tomó a su hija en brazos; a pesar de las burlas que recibió y de la petición de su esposa para que volviera a acostar a la niña con su hermano y Teddy se negó rotundamente, manteniéndola en sus brazos hasta el momento en que recibió el mensaje en el galeón. Fred le había pedido que se quedara con los niños pero se había negado, alegando que no podría con la incertidumbre. Finalmente el mayor de los pelirrojos y su esposa habían desaparecido para alertar a su familia, Tonks partió con los bebés para refugiarse con su madre, Remus desapareció para alertar al resto de la orden mientras que los gemelos, Ginny y ella partieron directo a Hogwarts. Estaba muy preocupada por sus hijos pero confiaba en que estarían a salvo. Estaba completamente perdida en sus pensamientos por lo que la mano en su hombro la sobresaltó. Miró alrededor dándose cuenta de que "el elegido" ya no se encontraba en la sala, Ronald la miraba con una expresión indescifrable. Vio a su pelirrojo esposo que parecía preocupado, aún mantenía la mano en su hombro.

-Lizzie ¿estás bien? ¿Quieres ir con los niños?-

-Buen intento- respondió con una pequeña sonrisa- solo estoy un poco preocupada por Emma y Daeron, pero sé que estarán bien con Tonks-

-¿Por qué no vas con ellos?-

-¿Y dejarte aquí? No. Puedo ayudar-

-Lo sé, pero estaría más tranquilo si fueras a casa-

-Te encantaría que nunca saliera de casa- respondió burlona sacándole una sonrisa al pelirrojo que pronto fue arrastrado por sus viejos compañeros. Ronald se acercó a ella.

Nuestro castigo, su castigo : su boda (Fred Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora