Me congelo y no sé qué decir. KJ me mira demandante, y río de una manera boba y quedo boca arriba.
—Creo que te he dado una orden, Cassandra.
Muerdo mi labio de una manera juguetona y me gateo hacia papi, su semblante es serio y parece que no está dispuesto a cambiar la forma en qué me ve.
—Vamos papi, no seas así.- me pongo de rodillas y juego con el elástico de su pantalón de dormir. Jala mi cabello y me hace mirarlo a los ojos. Sus pupilas están dilatadas y puedo notar que está furioso.
—Obedece Cassandra.
Hago un puchero y no parece importarle.Me resigno y obedezco, doy la vuelta quedando a espaldas de él, poniéndome en cuatro.
Sin previo aviso su mano se estampa contra contra mi piel desnuda de mi nalga. Muerdo mi labio con fuerza tratando de hacer el menor ruido posible.
Cuando trato de dejar pasar el dolor vuelve a golpear de una manera aún más fuerte que la anterior. Chillo.
—Si no guardas silencio va a ser una más.
Asiento mientras muerdo internamente mi mejilla. Su mano soba mi piel sensible, doy pequeños gemidos.
—¿Qué acaso no quedó claro el que yo solo puedo tocarte? ¿En que momento te di el permiso de hacerlo?-vuelve a pegar. Jadeo y aprieto las sábanas con todas mis fuerzas.
Mis ojos me pican y puedo sentir una lágrima resbalando por mi mejilla.
—Papi... por favor, para.-digo de una manera apenas audible.
KJ parece notar mi dolor y masajea mi trasero, se inclina y da pequeños besos en mi espalda. Me da la vuelta, se abre paso entre mis piernas, jadeo al sentir su erección contra mi feminidad. Lo único entre nosotros es la tela de su pants.
Besa mi cuello mientras acaricia la piel de mi cintura.
—Te amo más que a nada en el mundo bebé, no se te olvide que solo eres mía y de nadie más.Perdónenme por desaparecerme de nuevo, añajsmajsns