Donde las camelias florecen. ⚫Bwoo⚫~⚫J.So⚫

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Dedicado a: PiaaAmpuero

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No recordaba la última vez que se sintió tan intimidada con tan solo una mirada.

Ese hombre era malo, lo supo desde que sus ojos se encontraron con los de él, y parecía lleno de odio hacia ella, aún cuando solo se habían conocido por primera vez en tan solo un par de minutos atrás.

Somin estaba intrigada con ese hombre, demásiado.

JinYoung había pasado la noche tras las rejas siendo libre en cuanto el sol salió de su escondite. El delgado hombre de cabello lacio y azabache, apuesto; que por muy sería la polémica que había causado había que admitirlo, se refugió en su solitario hogar, echándose a llorar sobre su cómodo y blando colchón, mucho mejor que el tablón en la que había dormido anteriormente.

Tenía rabia, estaba increíblemente frustrado...

Todo por estar enamorado, y peor aún de un chico que no mostraba ningún interés por los del mismo sexo.

Haciendo memoria durante su estadía tras las rejas, recordaba a la perfección el día en el que él había llegado a trabajar en el Jardín de las Camelias. Su torpeza y sus divertidos movimientos al anotar sobre las hojas de su libreta los primeros pedidos, lo había cautivado.

Quería ayudarlo, y brindarle todo lo que el chico necesitaba, pero siempre había un obstáculo que impedía que lograra sus objetivos.

Y ese impedimento era BM.

Lo odiaba... Lo odiaba por ser el compañero del joven que no salía de su cabeza, lo odiaba por tener toda la atención de él, lo odiaba por hacerlo reír cuando el mismo era quien debía hacerlo.

Simplemente lo odiaba por arrebatarle su sueño, y por ello, BM debía pagar un precio.

Fue así como decidió hacerle la vida imposible, regañandolo por cualquier cosa, amenazándolo para que lo despidieran, rompiendo los pedidos que anotaba en su libreta para que tomara las órdenes nuevamente, haciéndole sancadillas fingiendo inocencia, y muchas cosas más.

Quería que BM se fuera y dejara a J.Seph libre, porque el debía ser su compañero, no Matthew.

BM simplemente no debió haber nacido.

Pero todo cambió cuando lo vió aquella tarde hablar con la pelirosa, y supo que BM se había enamorado de ella y no de él.

Sintió una pizca de vergüenza al notar que el chico quizás nunca estuvo interesado en Taehyung, pero aún así, lo odiaba por quitarle su tiempo apreciado donde él pudo ser cercano a J.Seph.

Tanto odio que tenía,  provocarlo le encantaba, pues ya se había acostumbrado a ver la expresión de enfado en el rostro del rubio. Por lo que cuando golpeó la botella de vino sobre su cabeza, sintió su dolor y sonrió, no obstante, no le gustó aquello... Sintió por primera vez arrepentimiento.

Vueltas y vueltas al asunto, tras calmarse un poco cuando estaba subiendo a la patrulla, vió a lo lejos a J.Seph llamando desesperado por teléfono, le dolió su pecho ver ante sus ojos las lágrimas que caían sin parar.

Hablaba angustiado, por su culpa, sintiéndose aún más mal sin poder escuchar la conversación con atención, donde solo despertó de su trance al escuchar entre todas las palabras...