Donde las camelias florecen. ⚫Bwoo⚫~⚫J.So⚫

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La noche estaba preciosa, y la temperatura del clima era realmente agradable.

El jardín de las camelias comenzaba a llenarse poco a poco de gente, hombres y mujeres que deseaban divertirse, y que mejor lugar donde los brotes de las flores ya habían abierto.

Era todo un espectáculo maravilloso.

Camelias rojas por todos lados, combinados con los verdosos arbustos, representando la belleza de la naturaleza.

Los meseros corrían prácticamente atendiendo sin quitar sus sonrisas de sus rostros, alegrando el ambiente con alguna de sus bromas a los clientes, o incluso, realizando pequeños trucos de magia, sorprendiendolos a todos.

B.M limpiaba unas copas, sin despegar la vista de la entrada, tratando de buscar a la pelirosa que ansiaba tanto, la chica tierna que le atraía y de la que se había enamorado.

Mientras que J.Seph se encontraba a su lado, realizando lo mismo que su compañero, pasando un trapo por una copa la cual ya había limpiado hace bastante rato.

- ¡Oigan cabezas huecas!, ¿Qué les pasa?, Esas copas ya están limpias -Uno de los meseros paso su mano por el frente de ambos chicos tratando de que les prestara atención -Hay mucho trabajo que hacer, deberían comenzar ya a moverse.

- Cállate JinYoung, estamos esperando a nuestras clientas especiales -J.Seph sacudió su cabeza despertando de sus profundos pensamientos y miró a su amigo que al parecer estaba en la misma que él.

- ¿Y si no vienen?, ¿Se quedarán limpiando la misma copa toda la noche?

- Si no aparecen en quince minutos más, iremos a atender -B.M lo miró con el ceño fruncido -Ahora vete a lo tuyo, y no te metas en lo que no te incumbe.

- Perdón rubio teñido -JinYoung soltó un chasquido molesto -Pero deberías tenerme más respeto, si no quieres que te despidan... Esta misma noche -El mesero sonrió burlesco y se dió la vuelta para continuar en lo suyo, sin darse cuenta de que B.M estaba apunto de darle un puñetazo, pero fue interrumpido por J.Seph.

- Calma, calma -J.Seph observaba como JinYoung se desvanecía de su vista, sabía que odiaba a Matthew, y que éste último también lo odiaba... El sentimiento era mutuo, pero debía evitar que hicieran algún desastre esa noche, y sabiendo lo impulsivo que era su amigo, debía estar atento a él en cualquier momento.

Ambos suspiraron y trataron de relajarse luego del momento tenso.

Pero una mano pequeña, se posó en el hombro de Matthew, y cuando el volteó para ver quién era, J.Seph hizo lo mismo.

- Hola -Jiwoo y Somin estaban frente a ellos, perfectamente maquilladas y peinadas, esperando a que ellos decidieran ir a atenderlas -¿Nos guardaste una mesa, o se te olvidó que veníamos? -La pelirrosa sonrió.

- Oh... Humm... ¿J.Seph? -Matthew codeó a su amigo que estaba con su boca abierta, y le susurró -¿JinYoung ya me mató no es cierto?... Es que veo un ángel.

- No amigo... Creo que yo estoy muerto -Ambos susurraban entre sí y Somin levantó sus cejas, para después piñiscar la oreja de J.Seph -Tú y yo tenemos que hablar, pero después de que nos atiendas.

J.Seph pestañeó varias veces y asintió levemente sonrojado, haciéndole una seña a ambas chicas para que lo siguieran.

Les dió la mesa al aire libre, frente al escenario donde en unos momentos comenzaría un show, y les dió la carta, esperando a que decidieran.

B.M anotó las órdenes y se fue prácticamente corriendo de la mesa, dejando a su amigo sólo, mirando directamente a la castaña que miraba todo a su alrededor curiosa.