Al final siempre te eligiría a ti.

Capítulo 1

-Disculpe, Disculpe- podía escuchar una voz a lo lejos que se hacía cada vez mas intensa.

Inmediatamente despierto de un brinco.

-Señorita hemos llegado a su destino- dijo un hombre muy atractivo con una enorme sonrisa en su rostro.

Estaba algo desorientada observe para todos lados y ya no se encontraba nadie en el autobus..

- Y tú quien eres?- Lo mire un poco confundida...
-Mi nombre es Arturo, Arturo watson y llegamos a la Agencia.

Intenté ponerme de pie..
-Dejame ayudarte-Extendió su mano y la tome con cortesía..
Bajamos juntos del autobus...

Les cuento que es mi primer día de trabajo soy diseñadora mi madre fué una diseñadora de modas muy reconocida allá en Italia y desde niña me he convertido en una gran admiradora de todos sus diseños admiro mucho a mi madre y creo que ella me ha inculcado está pasión por el diseño desde nuestra llegada a New York he intentado involucrarme en cosas que me gustan, hace unos días entregue mi curriculum a una Agencia de Moda y hoy es mi entrevista confieso que estoy un poco nerviosa siempre y cuando no dejando que los nervios me ganen.

-Y ¿Cuál es tu nombre?- Preguntó el chico rubio del autobus.

-Soy Alana- Respondí un poco tímida.

-Alana que precioso nombre ¡Me gusta!-Sonrió ampliamente

-Gracias- le manifeste una pequeña sonrisa

-Veo que eres un poco tímida, si crees que hablo mucho dimelo- Su mirada era tierna y simpatica.

-No te preocupes aveces suelo ser un poco antisocial- Lo mire a sus ojos, su color era un azul intenso podría jurar que me perdí un poco en esa mirada...

-Suele pasar a mi me pasa muy amenudo incluso pensé mucho en que te diría antes de hablarte, te vehías muy linda dormida y no quería molestarte.

Nos miramos por un instante su rostro reflejaba una sonrisa encantadora me estaba poniendo algo incómoda así que decido evadir el momento y entrar a la Agencia.

Tome un respiro y abrí la puerta observé que arturo seguía mis pasos, dirijiendome a la recepción sentí un fuerte golpe en mi brazo.

Voltié inmediatamente.

-Ten cuidado!- Observe a un hombre de traje entero castaño ojos color pardo no se porque de alguna u otra manera este se me hacía algo conocido.

-Disculpe, no te vi- Observé como este hombre me vehía muy extraño sin decir palabra alguna me evadio y camino rápidamente hacia el acensor.

Que extraño ese tipo-Pensé

¿Estas bien?- Escuche una voz detrás de mi era Arturo.
Lo mire y sonreí cerenamente.

- Si no te preocupes.

Terminamos de llegar donde la recepcionista y le comentamos nuestro motivo de visita.

Entiendo joven ya casi la atiende el señor Harretche.

Imediatamente mi corazón se detuvo entre como en un transe profundo mi cuerpo se extremeció fuertemente ese nombre ¡No podía ser él! No ahora a lo  mejor es otra persona respira Alana te están mirando extraño...

Alana, Alana-Escuche fuertemente como Arturo me llamaba

Recupere mi estado normal mi respiración se acortó .

¿Estas bien?- Tomandome entre sus brazos me dirijió hacía una silla, no sabía que responder estaba atónita de tan solo pensar en su nombre oh peor aún en que fuese él las cosas no iban a marchar bien, a lo mejor estoy siendo algo exagerada no solo él tiene ese apellido estamos en New York hay muchas personas importantes con el mismo apellido, ya debería de olvidarme por completo de todo lo que me une a él.
En ese preciso momento observé lentamente a arturo parecía preocupado.

-¿Alana? ¿Que ocurrió?- Insistió

-Estoy Bien Arturo no te preocupes solo tuve un mareo, no tan importante- Intenté ponerme de pie mientras el me ayudaba.

Jovenes el Director Harretche los espera en su oficina- Dijo la recepcionista mientras colgaba el télefono.

-Lista- preguntó Arturo..

Asentí y nos dirijimos al acensor...

Mis pasos se retornaron despacio mis pensamientos ahora golpeaban fuertemente en mis recuerdos....

(23 de abril)

" Alana donde estas, se que no puedes esconderte de mi..
ya sal ha pasado un rato, te extraño... en ese instante corrí rápidamente detrás de él avalansandome entre su espalda mientras besaba con delicadeza su cuello y persivía ese aroma varoníl.

¿Que pasa contigo? No vuelvas a esconderte a si de mi- Sonrío mientras asercaba sus labios a mi boca... Besarlo a él era como estar bebiendo agua con mucha sed la pruebas un poco y te desesperas por más, Sus labios tenían un sabor dulce su respiración congeniaba con la mía, sus ojos grandes mirandome con admiración, era algo que no cambiaría por nada.
Mi corazón esta confiada en él lo amo y yo se que él me ama a mi.

-Sientes como láte mi corazón- Susurro en mi oido.

-No, por que lo hace? Pregunte viendole a los ojos.

- Me pones muy nervioso- Contestó con una pequeña sonrisa.

Quería tomarlo del rostro y besarlo hasta saciar mi sed por él.

- Cuan importante te has convertido para mi, y cada vez que no estás conmigo siento que muero poco a poco no imagino una vida sin tí.- Tomandome entre sus brazos lo acaricie lentamente mientras el cerrba sus ojos complacido, lo que sentía por él era algo inexplicable la necesidad de estar con él de que él me hiciera suya y me amará sobre pasaba cualquier cosa.

Abriendo sus ojos me tome fuertemente entre sus piernas nos miramos poco. No dijimos palabra alguna con una pequeña mirada sabíamos lo que buscaba nuestro cuerpo y corazón colocandome en la cama y posandose lentamente sobre mi comenzó a besarme de una manera tan cálida, penetrando lentamente su lengua en mi boca sentí como mi cuerpo se extremeció, tomandolo del cuello introduje lentamente mi lengua sobre su boca para chocar con la suya y entonces......"

-Oye pensadora en que tanto piensas?- mire unos ojos azules observandome detenidamente.

- Que? ¿Cómo?- Contesté confundida, había vuelto a la realidad.

-Estás muy pensadora hoy oh siempre eres así?- sonrió algo divertido

- Perdona no se que me pasa- Reí con él.

Sabía lo que pasaba y justamente había abierto un baúl de los muchos recuerdos que no quería recordar, de aquellos que tanto me hicieron daño, que intenté con mucho esfuerzo borrar de mi vida y de mi corazón, el proceso había sido largo y ahora en un instante con tan solo haber escuchado un simple nombre todo el esfuerzo y dedicación a olvidar lo heche a la basura. ¿Cómo había sido posible?

¿Realmente estaba olvidandolo oh solo he engañado a mi corazón durante estos 4 años?

-Estás lista para hablar con el Jefe?- Dijo Arturo un tanto nervioso.

-Asentí mirando como se tomaba con fuerza sus manos.

-Todo va a salir bien Arturo- Guiñe mi ojo mostrandole confianza

Él asintió y toco mi mano, se volvió hacía la puerta de la oficina y la toco dos veces, era el momento estabamos a punto de conocer al Jefe..