Porque hemos caminado por diferentes caminos,
mas siempre nos mantuvimos unidos.Finos y casi imperceptibles hilos, nos mantuvieron juntos sin importar nuestro destino.
Por mucho tiempo pensé, que el final sería un precipicio. Pero he descubierto que con solo ver sus ojos vuelvo al inicio, de un sendero que solo me da afortunados perjuicios.
La sangre caliente y espesa,
me mantiene valiente ante la idea, de que quizá nuestra evolución no haya tenido una conjunción, pero seguramente nuestra manera de ver el mundo, terminará juntando nuevamente nuestras cabezas para ver juntos el nuevo amanecer.