Es que en mi vida lo que no faltan son sueños.
Puedo garantizar que desde que nací existen en mi pecho fuegos que me animan a seguir.
Pero nací con esa temida maldición que llaman temor, y que no me deja vivir.
Porque desde que tengo memoria me aterra el porvenir, y me hace sufrir el pensar de más.Cada obstáculo en mi vida significa horas de pensamiento, y remordimiento.
Cada elección tomada significa días en los que permanezco sentada, apesumbrada e intentando develar el futuro para así estar segura de que fue una elección sana.