15 DÍAS, UN VUELO Y UN CAFÉ. ( 2 temporada de bullying joel pimentel)

DÍA 7

                                                                               MARATÓN 3/5

- Cálmate.____ despierta. 

Abrí los ojos, estaba empapada de sudor, sentí mi corazón latir muy rápido. Joel me tenía agarrada de las muñecas.

- Eres un peligro cuando tienes pesadillas, casi me sacas un ojo – dijo Joel soltándome y sentándose a mi lado.

- La vi- fue lo único que puede decir.

- ¿a quién?

- La persona... la persona que me estaba tomando fotos. Es una mujer, la vi en un callejón yo la estaba siguiendo de repente paro, se dio la vuelta y vi su rostro. Se me hizo muy familiar pero estoy segura de que nunca la he visto en persona. Después me dijo "ten cuidado" ella desapareció y todo se puso negro.

- Tranquila solo fue una pesadilla – dijo.

- Si por suerte, eh... ¿Por qué estoy en esta habitación?- dije mirando a mi alrededor.

- Te quedas te dormida en el sofá y ese no es un lugar muy cómodo para dormir, entonces te traje aquí – no le respondí porque me quede pensando en Joel trayéndome hasta acá.

- Voy a traer el desayuno, ya vuelvo – asentí.

- Joel – dije y me miro con curiosidad – gracias – el sonrió y eso me hizo sentir algo raro, indescriptible.

Ya estando sola, observe el cuarto, era amplio, totalmente blanco, tiene un closet empotrado, aun lado había a una puerta de madera que daba paso a un baño. En el centro de la habitación estaba la cama, con sabanas azules en un tono pastel y un edredón blanco tan suave como la piel de un bebe.

Joel entro con el desayuno. Waffles con miel, fruta picada y jugo de naranja. Todo se veía muy tentador.

- ¿lo hiciste tú? – pregunte.

- No, lo hizo Daniel los desayunos son su especialidad – respondió.

- Oye, no te gustaría hablar con los chicos? No sé si hice bien o mal pero ya le dije a Christopher que te vi, por lo menos deberías hablar con el – dije después de un largo silencio desayunando.

- Podría intentarlo- dijo.

- Bien – tome el celular, busque el contacto de Chris y le llame, al segundo tono contesto.

- Hola – dije – Chris, estoy con Joel, creo que ustedes deberían hablar por eso te he llamado - "de acuerdo" dijo y le di el celular a Joel.

Entre en el baño mientras Joel hablaba, aproveche para lavarme la cara y recogerme el pelo en una coleta. Cuando Salí del baño Joel ya no estaba en la habitación por lo tanto baje a la sala.

- Y?? – dije al fin viéndolo en el sofá.

- Todo está perfectamente bien – sonrió y de verdad se notaba que estaba feliz – ven acá - dijo palmeando el sillón al lado de él.

- Gracias – susurro en mi oído, después se quedó mirándome y me beso. En ese momento juraría que estaba temblando y me di cuenta que era todo lo que estaba necesitando en estos años, sentirlo junto a mí y deseando que nunca acabe.

- Después dicen que no necesitan condones – dijo Jeremy entrando en la sala y en seguida nos separamos y me puse tan roja como la nariz de un payaso.

- Tu como siempre arruinando todo – le dijo Joel.

- Deberías tener más respeto por la personas solteras, mejor me voy a tomar una siesta – dijo.

- Hace como 4 minutos te levantaste Jeremy – él se levantó del sofá y reviso su reloj.

- Tienes razón.... Espera... un poco más... ya casi... listo ya son 5 minutos. Ahora si me voy a dormir – dijo saliendo de la sala y Joel y yo empezamos a reír.

- Joel, ya me tengo que ir, ya sabes cómo está mi padre – dije caminando hacia la salida y Joel siguiéndome.

- Una última cosa señorita – dijo girándome.

- Cuál? – pregunte.

- Esto – dijo tomando mi cara entre sus mano y agachándose un poco para besarme.

Llegue a mi cuarto del hotel, todo estaba silencioso hasta que vi a papa en mi cama y dijo:

- Estas no son horas de llegar _____.

- Me voy a bañar, no estoy de ánimo para hablar contigo - dije.

- Como quieras, alista tu equipaje mañana nos vamos a España – dijo y camine detrás de el hasta la puerta.

- No, espera yo no me quiero ir –dije apresurada.

- No estabas de ánimo para hablar conmigo, lo recuerdas – dijo y su aire de arrogancia me irrito.

- Te odio – grite y cerré de un portazo.