ADVERTENCIA: Este capitulo contendra lemon, aviso para aquellas personas que sean menores de 15 años o que no les guste este tipo de cosas
Ambos saiyajines se besaron tiernamente por varios segundos. Despues salieron de la casona y se dirigieron a la casa de Kakkarotto. Una vez que llegaron ahi, Kakkarotto cargo a Vejita estilo princesa y entro a su casa
-No sabia que pudieras ser romantico- dijo Vejita sonrojada
-Solo con mi princesa- dijo Kakkarotto
Kakkarotto siguio caminando hasta que llego a su habitacion para despues bajar a Vejita de sus brazos y vendar sus ojos
-Kakkarotto, no veo nada- dijo Vejita
-Ese es el chiste- dijo Kakkarotto
Unos segundos despues, Vejita pudo abrir sus ojos y vio que la habitacion estaba decorada para la ocasion. En el piso habia un camino de rosas con velas en las orillas, y en la cama habia un corazon de con las letras "K y V" en medio junto a un tazon de fresas (La fruta favorita de Vejita)
-Kakkarotto...- susurro Vejita sorprendida
En ese momento, Vejita sintio unos brazos que la rodearon por la cintura mientras algo se posaba en su hombro. Poco a poco se volteo y, al quedar frente a Kakkarotto, lo abrazo por el cuello y comenzo a besarlo tiernamente; algo que el correspondio abrazandola por la cintura mientras introducia su lengua en su boca. Varios segundos despues, ambos se separaron por la falta de aire (Puto oxigeno XD)
-Vejita... ¿Permitirias a este soldado tocar por primera vez su cuerpo?- pregunto Kakkarotto acariciando su mejilla
-Desde que tu y yo aceptamos casarnos... Mi cuerpo y mi alma te pertenecen- respondio Vejita
-Lo se... Pero quiero hacer las cosas bien, por eso quiero pedirte permiso antes de hacer las cosas- dijo Kakkarotto
-De acuerdo, sera como tu quieras- dijo Vejita
Kakkarotto y Vejita volvieron a besarse mientras comenzaban a quitarse sus trajes. Poco a poco caminaron hacia la cama hasta que cayeron en ella. Kakkarotto tomo una fresa y la mordio para despues derramar el jugo en el cuello de Vejita y quitarlo con su lengua
-Ka-Kakkaroto- dijo Vejita nerviosa
-¿Que pasa, mi amor? Pense que te gustaban las fresas- dijo Kakkarotto "inocentemente"
-No es eso- dijo Vejita aun mas nerviosa
-En ese caso...- dijo Kakkarotto
Kakkarotto tomo otra fresa y la coloco en la boca de Vejita
-Veamos que tan resistente eres, intenta no partir la fresa con tus dientes- dijo Kakkarotto
Kakkarotto volvio a lamer el cuello de Vejita mientras, con sus manos, desabotonaba su sosten y masajeaba sus pechos. Miro hacia el rostro de Vejita y vio como le temblaban sus labios mientras sus mejillas se tornaban de color carmesi
-¿Te gusta?- susurro Kakkarotto
Vejita solo asintio levemente con la cabeza; lo cual hizo que Kakkarotto sonriera de lado y comenzara a lamer sus pechos. Esa fue la gota que derramo el vaso para Vejita, ya que termino por morder la fresa
-Veo que no pudiste resistir a mis encantos- susurro Kakkarotto
-Callate- dijo Vejita sonrojada
-Tranquila, esto apenas comienza- dijo Kakkarotto
Pero antes de que Kakkarotto pudiera continuar, Vejita logro rodar en la cama y dejarlo debajo de ella
-Veo que te gusta ser el dominante- dijo Kakkarotto
-Cierra la boca y disfruta- susurro Vejita
Vejita se acerco al cuello de Kakkarotto y comenzo a lamerlo mientras, con sus manos, tomaba una fresa y (Con su jugo) la embarro por todo el pecho de Kakkarotto
-Vaya que te gustan las fresas- susurro Kakkarotto
Vejita sonrio de lado mientras comenzaba a quitar el jugo de la fresa con su lengua. Poco a poco comenzo a descender por su abdomen pero su cabeza fue tomada por las manos de Kakkarotto; quien la llevo hasta su rostro y la beso apasionadamente mientras rodaba en la cama (Quedando nuevamente encima de ella)
-¿Que pasa? ¿No te gusta?- pregunto Vejita confundida
-Al contrario, me encanto. Pero yo tambien quiero hacerte disfrutar- respondio Kakkarotto
-Entonces hazlo- dijo Vejita apenada
Kakkarotto se acerco a Vejita y volvio a besarla mientras quitaba sus calzoncillos, dejandola completamente desnuda. Ambos rompieron el beso y Kakkarotto se levanto un poco para mirarla fijamente
-Realmente eres una belleza, mi amor- susurro Kakkarotto
-Pero no quisiera ser la unica sin ropa- dijo Vejita
-En ese caso...- dijo Kakkarotto
Kakkarotto se levanto de la cama y se quito la ropa hasta quedar en ropa interior. Estaba a punto de quitarse el boxer pero fue detenido por Vejita
-Todavia no te los quites, te ves muy apuesto asi- dijo Vejita
Kakkarotto tomo sorpresivamente a Vejita y la estampo contra la pared para despues besarla apasionadamente; algo que primero la sorprendio bastante pero despues correspondio mientras enlazaba sus piernas en su cintura
-Vejita... Te amo- dijo Kakkarotto con la respiracion agitada
-Yo tambien... Kakkarotto- dijo Vejita de la misma forma
-Vejita... Necesito estar dentro de ti- dijo Kakkarotto
-No tan rapido- dijo Vejita
Vejita bajo de los brazos de Kakkarotto y lo empujo hasta la cama para despues recostarlo y sentarse encima de el
-¿Que piensas hacer ahora, mi amor?- pregunto Kakkarotto
-Tu solo disfruta- susurro Vejita
Vejita tomo el boxer de Kakkarotto y comenzo a quitarlo lentamente hasta que estos se encontraban en el suelo. Despues se posiciono encima de su miembro y comenzo a sentarse encima de el; lo cual provoco que diera un pequeño quejido
-¿Te encuentras bien?- pregunto Kakkarotto preocupado
-Si, tranquilo, es normal si me duele la primera vez- respondio Vejita acariciando su mejilla
-Al menos ya esta completamente adentro- dijo Kakkarotto
-Eso quiere decir que soy completamente tuya- susurro Vejita
-Para siempre... ¿Puedo moverme?- pregunto Kakkarotto
-Claro que si- respondio Vejita
Kakkarotto se sento en la cama e hizo que Vejita se aferrara a su espalda mientras comenzaba a moverse; lo cual provoco que ella gimiera en su oido. Al parecer esto le gusto, ya que se movio aun mas rapido
-Vejita... Creo que voy a...- dijo Kakkarotto entre jadeos
-Yo tambien... Kakkarotto- dijo Vejita intentando sujetarse de su espalda
Unos segundos despues, Kakkarotto se aferro fuertemente a la cintura de Vejita al momento de llegar al climax
-Vejita... Eres increible- susurro Kakkarotto
-Tu lo eres mas... Kakkarotto- dijo Vejita
-Oye... ¿Quieres una fresa?- pregunto Kakkarotto
-Claro que si- respondio Vejita
-Bueno... Vamos a la piscina y ahi comemos unas cuantas- dijo Kakkarotto
-Me parece perfecto- susurro Vejita
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Un amor de saiyajines puede ser eterno
Hayran KurguMuchas veces se piensa que el amor solo es pasajero... Pero no para Vejita... A pesar de que ella no crecio con este sentimiento en su entorno, supo saber lo que es amar a alguien... Kakkarotto demostrara que las clases no son obstaculo para ellos