24. De eso tan bueno no dan tanto Pt2

4K 535 78
                                    

Sus ojos se abrieron como platos. Era completamente consciente de que él no había retomado sus funciones como esposo, pues la situación aún era muy incómoda y confusa para su espíritu. Parpadeó varias veces tratando de alejar el intrusivo pensamiento que le decía que la pequeña y sugerente pijama de Ji Eun era para Jungkook, porque era imposible.

¿Somos amigos no? Lee Ji Eun es la asistente del Señor Jeon y Jungkook mi pareja ¿No es así? 

Se repitió mentalmente mientras regresaba a su habitación. 


💾

Con unas horribles y profundas ojeras Jimin despertó. Se sentía cansado, agotado, débil e impotente. Por más que trató de recordar nada vino a su mente. Sólo preguntas sin respuestas. Era casi el mediodía cuando dejó su habitación, tratando de no encontrarse con Jungkook. Se sentía incapaz de mirarlo a los ojos. Y ¿Si le era infiel? ¿Si le abandonó en cuanto lo secuestraron? Todos estos feos sentimientos se acumulaban en su interior creando una negra y densa nube sobre su cabeza.

Con firmeza salió de la mansión, tomando un auto directo al centro comercial. Eso en definitiva tenía que despejar su mente. Caminó al lugar, recapituló todas las cosas de las que era consciente. Era huérfano, tenía un adorable hermano -Hoseok lo llamaba cada dos días, lo hacía reír y lo mantenía al tanto de la empresa familiar- era asquerosamente rico, vivía con sus suegros y estaba casado. Aunque algunos elementos le traían incertidumbre otros le daban calma, como el no tener que trabajar y saber que Hoseok le cuidaba con mucho esmero.

Estacionó el auto y entró en el centro comercial. Una sonrisa se instaló en su rostro al ver la joyería. Su atracción por los anillos brillantes que encajaban a la perfección en sus dedos regordetes era inevitable. Después de comprar un juego completo dejó el lugar sintiéndose satisfecho. Su estómago rugió pues no había comido, por lo que fue en busca de un restaurante. Estaba a punto de llegar a un establecimiento de carnes cuando la puerta de emergencia a su derecha se abrió y una blanquecina mano de largos dedos lo jaló al interior.

Miró con horror al hombre pensando que otra vez sería envuelto en el calvario del secuestro. Y entonces se percató de la identidad del humano.

— ¿Yoongi Hyung?

— Shhh. No hagas ruido. Tenemos que salir de aquí — susurró el peliblanco a su lado tomándolo con fuerza.

— Yo no voy a ninguna parte con usted — sentenció el menor frunciendo el ceño. — ¡Suélteme! — Yoongi lo miró con extrañeza. Su hermosa bolita de arroz no habría hecho algo así.

— Vamos Jimin. Podemos discutirlo después. Es importante — Inquirió el mayor con prisa.

— Nada de eso — respondió el pelinegro soltándose.

— ¿Qué rayos pasa contigo?

— Usted es un mentiroso — afirmó el menor mirándole con desprecio — Y si no me deja ir, llamaré a la policía. 

El peliblanco parpadeó confuso.

— Yo sé que... que hay algunas cosas que no sabes aún. Por eso es importante que vengas podré mostrart-

— Y ¿qué me va a decir? — El menor se armó de valentía y gritó sacudiendo los brazos, dejando caer su bolsa — ¿Qué me ama? ¿Qué confíe en usted? ¡¡Cómo se atreve!! — Yoongi trataba de entender. ¿Acaso Jimin estaba loco?Su vida estaba en peligro, su secuestrador vivía con él y lo tenía que sacar pronto de aquel lugar. 

— Sé que estás confundido — trató de hablar el mayor con calma — Te aseguro que lo puedo explicar si me deja-

— ¡No! — sus manitas se hicieron puñitos — No quiero saber nada de usted. Ni de sus sucios negocios. No tuvo suficiente con arruinar a Taehyung y ahora ¡¿Viene por mi?!

¡Oh, No! Jimin no ahora. ¡Dios!

— Te juro que puedo explica-

— Váyase de una buena vez y jamás me busque. Usted es un asesino y un estafador. No dudaré en llamar a la policía — Y como si el mundo de Yoongi se derrumbara se quedó allí de pie en la escalera de emergencia, mirando la firme pared de cemento mientras Jimin cerraba la puerta tras él.


💾

Temblando trataba de poner la llave en el auto pero fracasó en el intento. Sus rodillas le fallaron una vez más y cayó al suelo. Lloraba y no sabía porque. Se niega a creer que Yoongi tenga alguna buena intención en su corazón pero aún así le duele. Saber que lo ama hasta los huesos y que simplemente es una de sus estafas más, le rompe el corazón. Toma inseguro el celular de su bolsillo y marca el número de emergencia.

— ¿Jimin?

— Por... por fa-favor Tae ¿Pue-des venir por mí? — pregunta sollozando. Sin esperar un segundo el rubio toma su abrigo del perchero y guarda las llaves en sus bolsillos.

— Dame la dirección y en 20 minutos estoy allí.



¡Por favor no me maten! ¡Dense cuenta que los amo! Lamento mucho no haber actualizado como lo prometí... estuve muy ocupada (siendo niñera. Eso quita mucho tiempo. ¡No lo hagan! ) así que me fue imposible actualizar. Odio cuando una escritora no cumple sus promesas y me pasó a mí (T-T). Por favor perdónenme. Ya lo que falta es muy poco. Gracias por leer hasta el final. Un abrazo y nos leemos pronto. 

Forgotten «Yoonmin»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora