Cuando Rias y los demás llegaron de su visita turística se fueron en tren a una ciudad. En el tren Natsu pedía que le mataran hasta que las chicas lo calmaron acariciándole la cabeza, no sin antes tener una guerra entre ellas por ver quien lo hacía. Después de tres horas de viaje llegaron a una ciudad gigantesca y moderna.
-Esta es la ciudad de Lucifaad, antigua capital del Inframundo. Antes de morir vivía el anterior Lucifer-sama. – Explico Kiba – A partir de aquí cambiaremos al metro.
Al salir del tren se pudo ver a un grupo de jóvenes demonios que gritaron emocionados al ver a Rias.
-¡Kya! ¡Es Rias-hime-sama!
Rias saludo con una sonrisa nerviosa al grupo.
-Al ser la hermana menor del Maou es muy conocida, además de por su belleza.
-Hiii. Mucha gente. – el pequeño vampiro se escondió en la espalda de Natsu.
-Oi Gasper, tu y yo vamos a hablar sobre vestirse con ropa de mujer. – le dijo serio.
-¡Nooooo!
Cerca del grupo Gremory había dos hombres de negro, no eran Men In Black, que esperaban al grupo. Eran sus guardaespaldas.
-Sera mejor que nos vayamos ya. ¿Está listo el tren?
-Hai. Sígannos por favor.
El pobre Natsu maldecía en todos los idiomas que conocía a los transportes. Después de llegar al metro este tardo cinco minutos en llegar a su destino, el cual era el sótano del edificio más grande de la ciudad. Al salir de él entraron a un ascensor.
-Vamos Natsu-kun. Ya queda poco. – decía Kiba mientras sostenía al pobre mago.
-Mátame. – suplicaba el pobre pelirrosa.
-Escuchadme. – Los llamo Rias – No importa lo que pase, no inicien ninguna pelea. La gente de arriba serán nuestros rivales. No debemos mostrar una fea forma.
Al abrirse el ascensor Natsu fue el primero en salir. Como siempre juraba no volver a subir a un transporte. Los demás le miraban con pena por su condición en estos. Al mirar enfrente vieron que estaban en un amplio salón. Una empleada se acercó a Rias e hizo una reverencia.
-Bienvenida Gremory-sama. Por favor sígame.
Después de caminar un rato Rias vio a una persona que estaba en una esquina.
-¡Sairaorg!
-Rias. Cuanto me alegro de verte. – saludo el extraño.
-Sin duda. Chicos este es mi primo por parte materna.
-Encantado. Soy Sairaorg Bael, futuro líder de la familia Bael.
El chico era el hermano gemelo "pelinegro" de Laxus. Era alto, apariencia dura, aspecto enérgico, un gran físico con muchos músculos, pero no era arrogante. Luego miro a Natsu.
-Ah, por fin te conozco Natsu Dragneel. – le dijo mientras le extendía su mano.
-¿Me conoces? – pregunto sorprendido aceptando su saludo.
-¿Y quién no? el que venció a Raiser Phenex, el dragonslayer de fuego, el hijo del dragón Igneel y el Sekiryuutei. Tenía muchas ganas de conocerte y espero poder pelear contigo en un futuro.
-Vaya. Yo también tengo ganas de luchar contra ti, se nota que eres fuerte.
Ambos se miraban con una gran sonrisa mientras apretaban la mano del otro. Sin duda se cayeron muy bien a la primera.