Las piezas de Diodora tenían capuchas pero el rostro descubierto.
-Bien. Participare.
Ante las palabras de Rias lo único que hizo Natsu fue rugir. Esto sorprendió a los miembros pero Rias intento calmarlo.
-Lo siento Natsu, pero tiene a Lucy como rehén. No podemos hacer otra cosa. – Al ver que Natsu apagaba sus llamas y se quedaba quieto decidió hablar – Bien, los que iréis seréis Xenovia, Koneko y Gasper. – Los tres se acercaron a Rias – Dejare las dos Torres a Xenovia, lucha con todo.
-Recibido. Soy buena en esas cosas.
-Koneko atacara a los peones, utiliza tu Sennjutsu para acabar rápido con ellas.
-Entendido, acabare rápido.
-Gasper será el apoyo. Natsu deja que beba tu sangre. – Natsu asintió – Bien, ¡Adelante!
-*Empezemos.*
Los sirvientes de Diodora tomaron actitud defensiva. Con una espada Kiba le hizo un corte a Natsu y Gasper empezó a beber. Después de eso su cuerpo se cubrió con un aura, sus ojos se pusieron de color rojo y empezaron a brillar. Xenovia convoco a Durandal y se lanzó contra las dos Torres.
-Pienso recuperar a mi amiga. Nunca antes tuve uno y ahora no pienso vivir sin ellos.
Las dos Torres se lanzaron hacia Xenovia. Se lanzaron con gran velocidad pero Xenovia ni se inmuto.
-Cuando la conocí la juzgue y amenaza de muerte por creer que por su culpa la monja había muerto y ella se lo había robado, pero me equivoque. Ella me ha tratado muy bien y me llamo amiga, por eso… ¡Voy a salvarla!
Xenovia libero una ola destructiva de Durandal que supero a las Torres. Después cambio sus movimientos y puso a Durandal en lo alto y con lágrimas grita.
-¡Por eso te lo suplico Durandal! ¡Dame poder para salvar a mi amiga!
Ante su plegaria el aura de Durandal aumento mucho. Había una inmensa cantidad de energía emanado de la espada. Alrededor de Xenovia todo comenzó a romperse por el aura sagrada que emitía Durandal.
-Me di cuenta de que no puedo reprimir a Durandal bien. Tomare mucho tiempo para conseguir controlarla como lo hace Kiba o Erza. Solo tengo que seguir adelante. Así que me decidí en aumentar la nitidez y el poder destructivo en su lugar. ¡Ahora vamos Durandal! ¡Respóndeme!
La espada empezó a crear pilares de luz. Un agujero se creó en el techo de la capilla y las oscilaciones de Xenovia fueron en dirección hacia las Torres. Estas se las tragaron cuando impactaron con las Torres. Ante el impacto el templo tembló con violencia. Cuando la vibración se detuvo se pudo ver dos grandes pilares frente a Xenovia. La mayor parte de la capilla había desaparecido ante el ataque. No quedaba nada de las Torres. Xenovia respiraba con dificultad ante la cantidad de energía que uso.
-Koneko, Gasper, os toca.
-Hai. – respondieron ambos.
Koneko saco sus orejas y cola de gato. Gasper no se movía de su sitio pero estaba tranquilo observando a los peones. Tres de ellas se lanzaron hacia el vampiro, el cual las detuvo completamente sin ningún problema. Otras tres se lanzaron hacia Koneko pero Gasper las vio y también las paro. Sin duda, el beber la sangre de Natsu le daba un gran control de su poder. Al ver que las dos restantes estaban muy confundidas por lo que paso Koneko se lanzó contra ellas. Usando su Sennjutsu las golpeo a ambas en el pecho para que no usaran su poder demoniaco y ya de paso dejarlas inconscientes. Hizo lo mismo con las que estaban paralizadas por Gasper. Al contrario que con Xenovia, al dúo le había resultado más fácil a pesar de que estaban promovidas a Reinas. Cuando Xenovia se recuperó siguieron avanzando. Quedaban aun dos Caballos, dos Alfiles, la Reina y Diodora.
