2- Una pérdida dolorosa

1.2K 45 4
                                    

De repente una voz interrumpió los pensamientos de Florencia.

- Disculpame, me dijeron del mostrador que querías hablar con el chef del lugar. Me presento, soy Jazmín del Río. Y tu plato está por salir en unos minutos. Tuvimos una demora por un inconveniente en el horno que ya está solucionado.

Hablaba con una tranquilidad sorprendente. A pesar de que Flor venía a quejarse y a despotricar toda su ira con alguien, le resultaba imposible con alguien que se dirigía de esa manera, con tanta seguridad.

- Sí, perdón. Yo soy Florencia Estrella, un gusto. No fue mi intención venirme a quejar así. No estoy teniendo un buen día y quería comer rápido antes de que mi hermana pase por mí.

De repente, se escucha una bocina de fondo. Era Virginia en su auto, mal estacionada, tratando de apurar a Flor para ir de inmediato al hospital.

- Ya voy Vir, VULVA MOLESTA. Bueno, me tengo que ir parece. No te hagas problema por lo del plato, vuelvo en otro momento.

Jazmín la despidió cordialmente y siguió con su trabajo en la cocina.

Virgina y Florencia llegaron al hospital lo más rápido posible. Ingresaron corriendo y en recepción, les informaron que su padre se encontraba en la habitación 51, piso 3.

Tomaron el ascensor y al salir, se encontraron con una 'agradable' sorpresa. Lucía y Carla, sus otras dos hermanas que hacía 15 años no veían.

- Qué hacen acá? Dijo Lucía, con su humor tan simpático de siempre.

- Por si te olvidas, Mario Estrella es nuestro papá también. Tenemos el mismo derecho de estar acá que ustedes, contestó Vir con altura.

- Bueno bueno, mmh, pueden parar de discutir? No ven que pueden ser las últimas horas de papá vivo y están acá las dos discutiendo como dos VULVAS ÁSPERAS. Flor ya no podía contener su desesperación, quería ver a su papá ya.

Se alejó de sus hermanas y se dirigió al pasillo de espera. Allí se encontró con otra sorpresita más. Una chica de aproximadamente 21 años se encontraba sentada, aguardando cerca de la habitación de su padre.

- Y vos quién sos?, preguntó Flor

- Hola, soy Miranda. Estoy esperando a mi mamá Coky, que entró a ver a su esposo, Mario Estrella.

- EH? Pero como? Él es mi papá, como que tu mamá es su esposa? Entonces vos sos...

- Sí, ni lo digas. Soy la hija, aunque el tiempo que pase con él fue insignificante, ya que nunca tuvo tiempo para mí. Lo que le pase, no me interesa en lo más mínimo.

Flor en este momento lo único que quería era que la tierra la tragara. Su padre internado a punto de morir, el reencuentro sorpresivo con Carla y Lucía, y encima ahora descubría que tenía una 4ta hermana. Acaso algún ser humano podía aguantar tantos sucesos en un sólo día?

Al ratito, vio salir a Coky de la habitación y sin pensarlo, entro ella a ver a su papá.

Miro a su alrededor y fijo su mirada en la cama. Donde estaba su padre muy deteriorado, casi sin poder hablar. A Flor le destruia verlo asi, pero tenía que ser fuerte y disfrutar sus últimos momentos con él.

- Papá, soy Flor. Acá estoy con vos. Por favor no nos dejes, no me dejes. Junto con Vir sos el único que me entiende. No te podés ir así, te lo ruego.

Terminó de hablar y sintió un apretón en su mano derecha. Su padre intentaba decirle algo con lo poco de oxígeno que le quedaba, aunque hizo su mayor esfuerzo. Necesitaba que su hija escuche su último pedido.

- Florcita, perdón. Ya no puedo más. Los médicos me dijeron que mi panorama es irreversible y necesito pedirte un favor.

- Lo que quieras papá, conta conmigo.

- Mi cadena de hoteles. Necesito que ustedes se queden a cargo de la principal sucursal, acá en Buenos Aires. Yo sé que por mi culpa, no tuvieron relación con sus hermanas. Más allá de que yo no este, quiero que ustedes se unan y saquen adelante el hotel. Abrió hace poco y necesita empezar a funcionar. Vos vas a ser la persona encargada de unir a tus hermanas, sólo eso te pido Florcita. Puede ser?

Flor no paraba de llorar ante lo que parecía ser la inminente despedida de su padre.

- Sí papá, te lo prometo. Voy a ser lo posible para cumplir tu pedido, no voy a fallarte. Te quiero mucho, gracias por ser tan bueno conmigo.

- Gracias a vos Florcita, yo también te quiero. No dejes de ser nunca quién sos y lucha por encontrar esa felicidad que vos tanto esperas.

Se estrecharon en un profundo abrazo, cuando de pronto, Flor sintió que los signos vitales de su papá ya habian cesado.

Estaba destruida, derrumbada, no sabía que hacer. Si salir corriendo en busca de ayuda o quedarse ahi inmóvil, al lado de su papá.

Pero lamentablemente, ya era una realidad. Mario Estrella había fallecido y antes de morir, le dejó una última petición a Flor.

Más allá de la tristeza que la inundaba, a partir de ahora su objetivo era solo uno.

Unir a todas sus hermanas, como sea.

Bueno, acá les dejó el segundo capítulo. Recién empiezo asi que me gustaría que me dejen alguna sugerencia y me digan si les está gustando o no la historia.

Prontito se vienen los momentos Flozmin!

@Fl0zminatica 😘

No hay manera de perdernos • Flozmin •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora