De estación en estación

Murió mi estrella

Una noche constelada me fingía alegría,

cuando vi brillar mas a la siempre estrella mía,

mi inocencia creía que mostraba su emoción

mientras los astrónomos veían solo la explosión.

Fueron muchos los días que llevaron mi engaño

jamás creí que mi estrella sufriera algún daño

pues se acababan los días de este admirador

pues jamás pensé en despedida, sin adiós fue peor.

Moría mi estrella, era su triste agonía

pasaron otros días, yo engañado todavía

miraba que el cielo me negaba su vista

las nubes no aclaraban que la estrella ya no exista.

La lluvia de repente no era buena señal

y aquí dentro me decían, que todo iba muy mal

jamás presencié como su luz ya se borraba

mi mente aun dudaba, pero mi alma lloraba.

Llegó el momento en que el cielo por fin se mostrara

y que el vacío en el cielo mis ojos presenciaran

solo era negro el lugar donde ella descansaba

y a mi mirada su espíritu muy lejos vagaba.