Era una tarde lluviosa y bajo el techo de su hogar
Se asomaba a la ventana tratando de ver pasar
Aquella niña que un día se fue sin decirle adiós,
La parte del corazón que el destino le arrebató.
Me contaban que estaba loca, en medio de su soledad,
Con desprecio no quise escuchar, porque su realidad
Era un trastorno muy duro que en medio del vacío
Azotaba lentamente su corazón herido.
Otros ríen porque a veces grita desde su ventana
Porque la llama a la mesa todas las mañanas,
Y yo sin embargo la veo, y , sus lágrimas no cesan,
Siempre mirando al cielo cuando por su niña reza.
Es madre que ha amado y que amará como el día
En que llegó a su vida y le llenó de alegría
Aquella niña que en vida solo a mamá conoció
Pues papá sin quererlo un día las abandonó.
Fue aquel día en que su lucha por cuidarla terminó
Pues la salud de la niña en poco tiempo empeoró.
Dios decidió llevársela para darle una mejor vida,
Pero olvidó a su mamá, que aún sufre su partida.
Ella cree que está viva, que se marchó, pero volvería,
Ella se hizo una promesa: que siempre la esperaría.
Será el tiempo que con su paso le hará entender
En un día como aquel, que en el cielo se podrán ver.
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De estación en estación
PoetryColección de poesía "El sentimiento muchas veces confunde... muestra simplemente la respuesta de las largas conversaciones entre el alma y el corazón, donde el alma siempre toma la iniciativa. Si esto alcanza la mente y las manos, el resultado será...
