Malos pensamientos.

mi maldicion...

Jake P. D. V.

Mi turno en la tienda de música por fin termino, aunque me gusta mi trabajo ya merezco descanso. Salí tan rápido que deje a una clienta con la palabra en la boca cuando me iba a preguntar sobre algo. Pero no me importo solo quería llegar a casa y verla.

Nunca pense que a los 17 años me enamoraría, pero paso. Judith, es el amor de mi vida. Lo que más quiero, por ella daría todo.

El día estaba extrañamente nublado y frío, pronto llovería. Tome el primer taxi que vi y le di la dirección. Por suerte hoy no había trafico, llegaría pronto. Mi buena racha termino con un semaforo en rojo, donde paso un pequeño niño vestido de cafe vendiendo rosas. Cuando llego a mi taxi, le compre unas rojas, pues eran las favoritas de Judith

La fachada de mi casa aparecio enfrente. No espere a que el taxista se estacionara, cuando ya le había pagado y salí corriendo gritandole "gracias". La razón de mi manera de actuar, era muy simple: amaba la idea de que Judith viviera conmigo.

Hace unos días tuvo una pelea con sus padres (peor que las habituales) y la corrieron de su casa. Como mis padres siempre estan viajando y los veo poco. La invite a vivir conmigo. No puedo dejar de pensar que cuando me case con ella, así seran todos los días. Despertar junto a ella y volver a casa solo para verla.

Entre y puse las rosas en agua. Cuando escuche un ruidos en mi habitación. Con una enorme sonrisa subí las escaleras, pero empece a escuchar risitas de ella y de alguien más, de un hombre. Abri la blanca puerta que de mi habitación y los vi. Mi Judith estaba recostada en la sabanas de mi cama con un vestido rojo que tenía subido hasta la cadera y las piernas y brazos en torno del chico de cabello bronce que estaba sobre ella y le besaba el cuello.

-¡Jake!- exclamo mi novia cuando me vio. El chico se quito de encima de ella y se paro frente a mi.

-¿Oscar?- pregunte incredulo. Ese chico que hoy me traicionaba, ayer fue mi amigo con quien estaba en el equipo de soccer.

-perdón hermano- me contesto. ¿como se atrevia a seguir diciendome hermano despues de esto?

-largate de mi casa- le dije lo mas tranquilo que pude. El asintio y salio. Me quede viendo por donde se fue hasta que escuche cerrarse la puerta principal.

-¿mi amor?- me hablo con una voz dule. La voltee a ver, se habia acomodado el vestido y estaba sentada en la cama.

-¿como te atreves a llamarme asi?- empece a gritar

-no seas exagerado-

-¡eres una zorra!- le grite cabreado. Ella se enojo pero era cierto. Ella era una zorra y yo un idiota. Uno que de cierto modo siempre supo que le ponian el cuerno, uno que trato de hacerse de la vista gorda y que ahora sufria las concecuencias. -vete de mi casa-

-no, ahora vivo aqui-

-no me importa vete- la tome del brazo y la obligue a pararse. Despúes jalandola la saque del cuarto y la arrastre hasta el inicio de las escaleras

-¡te vas a arrepentir! ¡te lo juro!- gritaba

-Vete de aqui, no te quiero volver a ver- le dije viendola a los ojos.

-eres un idiota- me contesto con una sonrisa burlona.

Una ola de ira recorrio todo mi cuerpo y la empuje para que se fuera. Pero cayo por las escaleras. Corrí con ella cuando la vi al pie de la escalera con una herida en la frente. Pero fue inutil.

La chica que mas habia querido en la vida, habia muerto. En ese momento el miedo me lleno. No quería ir a la carcel. E hice lo que mas me arrepiento de haber hecho. Puse a la chica que amaba en una bolsa y me deshice de ella a varios kilometros de mi casa.

Cuando volví de tirarla en un terreno valdío, tome una ducha muy larga y cuando salí solo me tire a la cama. Había empezado a llover fuertemente. El cielo de iluminaba de pronto y minutos despues todo se estremecia por el trueno. El viento golpeaba lastimosamente mi ventana, como si quisiera entar.

-lo siento tanto amor- susurre al viento y empece a llorar. La ultima vez que llore en años.

-eso no arregla nada- me contesto. Esperen ¿me contesto?

-¿Ju..judi...ttth?- tartamudee y ante mi aparecio. Con su largo y lacio cabello negro revuelto enmarcando su hermosa cara de piel blanca y labis rojos. Incluso llevaba el mismo vestido rojo esta el muslo de esta tarde. Lo unico diferente eran sus ojos, dejaron de ser de ese hipnotizante color verde para volverse completamente negros, sin pupilas ni iris. Solo un negro profundo y tenebroso.

-te dije que te arrepentirias- me dijo con su misma voz

-esto es imposible- una parte de mi se moría de miedo y otra era feliz por no haberla perdido para siempre

-ya viste que no- se me acerco amenazante

-¿que me vas a hacer?- esta vez el miedo gano

-nada... solo estare contigo por siempre- me dijo con una sonrisa burlona -me encargare de que sufras toda tu vida- me prometio

Los días siguientes fueron los peores de mi vida. Pues la policia estuvo buscando a mi supuestamente desaparecida novia. Tuve que pasar horas tratando de convercer con mi falsa historia de que se había ido esa tarde. Tuve que ver a sus padres y amigos llorar desconsolados. Al final la dieron por muerta y su expediente se cerro.

Han pasado 4 años y 5 meses desde eso. Y Judith cumplio su palabra, la veo siempre, con sus tenebrosos ojos y su vestido rojo, siempre de 17 años. Ahora nadie se me acerca por que me tiene miedo o cree que estoy loco. Perdí mi empleo y deje el equipo de soccer.

Pero me acostubre y ahora que estoy a punto de cumplir 22 años. He decidio hacer mi vida, por lo que entre a la universidad. Mi sueño: volverme escritor y contar mi historia en un libro, para de cierto modo quitarme este peso de encima y honrar su memoria.

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hola soy monster...

esta una historia que tengo planeada esciribir, pero no estoy muy segura.

POR FAVOR diganme que les parece la idea... me ayudaría mucho

Bueno a lado esta el video de la canción que me inspiro: disculpa los malos pensamientos de panda (por eso le puse asi a la historia).

BESOS