Love you, Mike || Mike Wheeler

Es él

Estábamos llegando a la residencia Wheeler, decidí que era mejor ir a casa de Mike y resolver todo este problema, no lo culpaba por actuar de esa manera, el creía que Will estaba muerto y los chicos también.

—Se le pasara el enojo —dijo Eleven y la mire—. Son amigos, los amigos no pueden estar enojados para siempre.

—Eleven —la llame y esta me miro—. ¿Will esta vivo? ¿Realmente esta vivo?

Esta asintió, no dudaba de ella, solo quería estar segura, pero no quería darme falsas esperanzas y terminar con que Will... esta muerto.

Al llegar a casa de Mike, fuimos a la puerta trasera, la cual estaba abierta y entramos como si nada. Llame a Mike, Eleven se sentó en su cama improvisada y tomo la Supercom que estaba allí, el susodicho bajo las escaleras y me miro con el ceño fruncido.

—¿Qué haces aquí? —pregunto, no con disgusto pero lo dijo con amargura.

—Genial, ahora me recibes con esta amabilidad —bromeé, pero solo me miraba seriamente y solté un suspiro—. Vamos, no seas amargado. Tuviste la culpa de que esta discusión comenzara y ahora debes disculparte.

—¡¿Por qué debería disculparme si ella fue la que mintió?! —exclamo, la ira me llego y quise gritarle, pero me calme y tome un gran respiro.

—Will. No. Esta. Muerto —solté palabra por palabra, Mike se me acerco y me miro a los ojos—. ¿Podrías al menos calmarte y escuchar lo que tengo que decir?

Eleven empezó a hacer ruidos con el aparato, lo cual hizo suspirar de cansancio a Mike, la miro y le pidió que dejara de hacer ruido.

—Si Will esta vivo, entonces ¿de quién era el cadáver que se parecía a él y que tiene la misma ropa que él? —cuestiono, Eleven seguía haciendo la cosa sonar y Mike la volvió a mirar con irritación—. ¿Eres sorda?

Ella solo le ignoro.

—No lo sé, ¿okey? —conteste, le tome de las mejillas y le hice que me mirara a los ojos—. Créeme, él esta vivo.

Sus mejillas tomaron un color carmesí, mire cada facción de su cara y me quede perdida en sus pecas. Al darme cuenta de que tan cerca estábamos, abrí los ojos como plato y me aleje de él, los dos tosimos pretendiendo que nada paso pero estábamos rojos.

Eleven nos miro sonriendo y yo solo la mire avergonzada.

Ella se concentro más en la Supercom y una voz salio de esta, una voz parecida a la de Will. Los dos nos miramos y corrimos a su lado, Eleven le estiro el aparato a Mike y este la tomo, acercándolo a nuestros oídos.

¡Era Will!

Al parecer balbuceaba lo que parecía ser una canción, sangre salia de la nariz de Eleven, quien nos miraba.

—Will, ¿eres tú? ¡Soy Mike! ¿me copias? —le hablo—. Cambio.

No contesto, le quite el aparato a Mike y lo acerque a mi oreja, este acerco la suya para poder escuchar.

—Will, ¿estas ahí? —apreté el botón y espere a que me contestara—. ¡Will!

No contesto, la cosa produjo un ruido extraño y ya no se escucho nada más, Mike me miro y mire a Eleven.

—¿Ese era...? —deje la palabra al aire.

—Will —asintió con una pequeña sonrisa.