CAPITULO 12: AOI

1.7K 151 4
                                    


Me desperté, estaba  medio dormido, de pronto me levanté, alguien estaba en mi cama, solté un bufido, esto había sido algo de mi mamá, en mi cama yacía dormida Arabella, sinceramente no era fea, pero yo ya tenía a alguien, tal vez fue que me comprometieron con ella porque su familia es de las más grandes traficantes de armas y mi familia en segundo lugar... pero, yo no me quería casar... bueno, si quiero casarme, pero con ella no, quiero casarme con Kei, pero... ¿Qué hago para volverlo a ver?- Mmm... buenos días cariño –Arabella me miró con una sonrisa, yo en cambio la fulminé con una mirada- Déjame en paz, y sal por favor de mi habitación, me da asco que me veas –Arabella me fulminó con la mirada y se acercó a mí- Mira... Déjame aclarar las cosas –me pasó un dedo por el pecho- Yo mando ahora aquí, y se hace todo lo que yo quiera, así que... Tengas o no una amada, yo me casaré contigo –la miré enojado, vi cómo se acercaba a mis labios y me sostenía el mentón con fuerza- Si tu enamoradita no te cuida bien, yo tomaré ventaja –suspiré, la vi salir- Que cuide bien de mi –dije en voz baja y suspirando.

12:32 pm (Thinking About You/ Laidback Luke Remix)

Salí de la ducha, me vestí y abrí la puerta, la escena que me encontré no fue para nada agradable, en mi cama yacía una Arabella en ropa interior de encaje, estaba en una posición bastante erótica, eso hizo que me sintiera apenado, me sentía incómodo con ella dentro de mi habitación- ¡Sal de aquí!, necesito cambiarme –Arabella me miró irritada- ¿Qué es Aoi? ¡Dímelo! ¿Por qué no te puedo gustar? –Sus ojos se llenaron de lágrimas- ¿Cómo es ella eh? ¡Dímelo! –Suspiré- No es alguien a quien te puedas parecer, porque número uno, ella es perfecta, es sencilla, aveces exagera las cosas, pero solo cuando es necesario, sus ojos azules son hermosos, su cabello entre negruzco y castaño fuerte, jamás serás como Kei, Kei entiende mis sentimientos, él nunca me obliga a hacer nada que yo no quiero y yo no le obligo a nada, estamos enamorados el uno del otro, tú nunca te parecerás a él –guardé silencio, había metido la pata- ¿Él? –Arabella me miró con rabia- Bien... entonces me desharé de Kei, lo buscaré en cualquier rincón de las ciudades, no importa cuánto tarde en encontrarlo, simplemente lo haré desaparecer de tu vida –Arabella salió de mi habitación, puse el pestillo y me encerré, no quería salir, quería estar solo... necesitaba verlo, verlo lo más pronto posible, ¿Pero cómo?...

Me desperté, estaba medio dormido, de pronto me levanté, alguien estaba en mi cama, solté un bufido, esto había sido algo de mi mamá, en mi cama yacía dormida Arabell, no era fea, pero yo ya tenía a alguien, ése compromiso no me iba a detener de estar algún día con Kei...quiero casarme con Kei, pero... ¿Qué hago para volver?- Mmm... buenos días cariño –Arabella me miró con una sonrisa de oreja a oreja, yo en cambio la fulminé con la mirada- Déjame en paz, y sal por favor de mi habitación –Arabella me fulminó con la mirada y se acercó a mí- Mira... Déjame aclarar las cosas –me pasó un dedo por el pecho- Yo mando ahora aquí, y se hace todo lo que yo quiera, así que... Tengas o no a alguien, yo me casaré contigo –la miré enojado, vi cómo se acercaba a mis labios y me sostenía el mentón con fuerza- Si tu enamoradita no te cuida bien, yo tomaré ventaja –suspiré, la vi salir, abrí mi cajón y saqué mi anillo de compromiso- Que cuide bien de mi –dije en voz baja y suspirando.

12:32 pm

Salí de la ducha, me vestí y abrí la puerta, la escena que me encontré no fue para nada agradable, en mi cama yacía una Arabella en ropa interior de encaje, estaba en una posición bastante provocativa, eso hizo que me sintiera apenado, me sentía incómodo con ella dentro de mi habitación- ¡Sal de aquí!, necesito cambiarme –Arabella me miró irritada- ¿Qué es Aoi? ¡Dímelo! ¿Por qué no te puedo gustar? –Sus ojos se llenaron de lágrimas- ¿Cómo es ella eh? ¡Dímelo! –Suspiré- No es alguien a quien te puedas parecer, porque número uno, ella es perfecta, es sencilla, a veces exagera las cosas, pero solo cuando es necesario, sus ojos azules son hermosos, su cabello, jamás serás como Kei, Kei entiende mis sentimientos, él nunca me obliga a hacer nada que yo no quiero y yo no le obligo a nada, estamos enamorados el uno del otro, tú nunca te parecerás a él –guardé silencio, había metido la pata- ¿Él? –Arabella me miró con rabia- Bien... entonces me desharé de Kei, lo buscaré por todo el mundo si es necesario, no importa cuánto tarde, simplemente lo haré desaparecer de tu vida –Arabella salió de mi habitación, puse el seguro y me encerré, no quería salir, quería estar solo... necesitaba verlo, verlo lo más pronto posible, ¿Pero cómo? 

LA APUESTA DEL MILLÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora