Se acostó a mi lado con la respiración agitada al igual que la mía, mirábamos hacia el techo sin hablar durante unos segundos hasta que rompió el silencio:
- Te quiero ____...
Cogí aire ante tal situación, no recuerdo la última vez que me dijo esas palabras. Me giré y le abracé apoyándome en su pecho.
- Yo también...
Notó que estaba pensando en algo:
- ¿Que sucede?
-¿Que va a pasar ahora? ¿Que vamos a hacer?
- ¿Por qué piensas en eso ahora?
- No lo sé, tengo demasiadas cosas en mi cabeza.
-Disfruta el momento.
Me quedé callada durante unos segundos
- No quiero arrepentirme de lo que he hecho, Niall.
-No lo harás. -dijo antes de besar mi frente.
Sonrei y cerré mis ojos.
-Buenas noches rubio -le susurré.
-Buenas noches pequeña. -me susurró también mientras acariciaba mi cuello.
Al poco nos dormimos ya que el alcohol que habíamos tomado ayudaba al sueño que teniamos.
Los siguientes dos días estuvimos en esa preciosa casa disfrutando uno del otro. Entre risas, abrazos por la espalda, claramente sexo tambien y veíamos películas mientras comíamos chocolate.
Necesitaba estar así con él más tiempo pero llegó el momento de irnos, esa mañana algunas nubes tapaban el cielo.
-No quiero irme. -decia mientras me sentaba en su regazo ya que me estaba esperando en el gran sofá del salón mientras terminaba de arreglar mis cosas.
- Que nos vayamos de aquí no significa que no vaya a tenerte para mí todo lo que quiera y más. -dijo mientras colocaba un mechón de pelo detrás de mí oreja.
- Eso será si yo quiero, ¿no? -vacilando.
- Si no quieres puedo secuestrarte. -dijo encogiéndose de hombros. - Y aunque me encantaría hacerlo, debemos irnos señorita.
- Vamos señor. -respondí cogiendo su mano cuando nos levantamos.
Una vez en el coche decidí poner un disco, pero no sabía cuál elegir. Entonces encontré un disco de Coldplay y lo puse.
- Buena elección. -dijo sonriendo.
- Son bastante buenos.
- Digo al elegirte.
Entonces me miró a los ojos y me salió una risa.
- Ha sido bonito pero te ha quedado muy cursi.
-Pero me quieres. -esbozando una gran sonrisa.
- No, te odio. -dije sonriendo también.
Entonces el se acercó a mí y cogio mi cara haciéndome mirar hacia él y me besó.
- Te quiero más. -dijo encendiendo el coche.
El camino hacia casa estaba siendo ameno, llevábamos un buen rato en la carretera, el viento era suave y la musica sonaba a un nivel medio.
Se veía el mar desde la carretera y lo observaba durante el transcurso del camino.
- Vamos a hacer una parada.
- ¿Donde? -pregunté ya que no veia nada a nuestro al rededor.
El se limitó a conducir un par de metros hasta que se metió en una carretera adversa.
Tras un par de minutos más aparcó enfrente de una pequeña playa.
- ¿Como sabías que esto estaba aquí?
Mientras salíamos del coche, el cogió una toalla para sentarnos en la arena.
- Salia en el GPS, como estabas todo el rato mirando el mar no te diste cuenta. -sonrio -Iba a decirte que lo tenía ya pensado pero mentiría.
- Vamos idiota. -dije cogiendo su mano.
Entonces nos sentamos en esa toalla enfrente del mar.
- ¿Hacemos una locura?
- ¿Que quieres hacer?
Entonces se quitó la camiseta y los pantalones, me quito la camiseta y yo me asusté.
- Niall, aquí no podemos hacerlo, ¿que pasa si viene alguien?
- Mente sucia. Es para meternos al agua.
- ¿Ahora? Que fría. -dije tapando mis brazos.
- Vamos quejica.
Entonces desabrochó el botón de mi pantalón.
- ¿Estás seguro de que no quieres hacerlo?
Sonrió mostrando sus dientes y tendiendome la mano para que me levantara, entonces lo hice y terminó de quitarme los pantalones.
Me cogió haciéndome imposible el escape de sus brazos y se metió en el mar.
- Esto está demasiado frío.
- ¿Quieres entrar en calor? -dijo besandome.
- ¿No decías que no?
- En ningún momento lo he dicho. -dice cogiéndome de la cintura haciendo que enrolle mis piernas en su cintura.
- Te odio.
- No más que yo. -respondió para después besarme apasionadamente y poner sus manos en mi culo. - Quiero acostumbrarme a esto.
- ¿A tocarme el culo?
- A parte, a estar siempre así. Sin ningún problema entre nosotros, sólo tú y yo.
- Yo también rubio.
Después de mucho insistir retomamos el camino hacia casa, no podía creer lo feliz que estaba siendo con él después de todo lo que hemos pasado.
- _____... - dijo casi susurrando.
Lo miré esperando que siguiera con lo que iba a decir, pero en ese momento solo pude ver como un coche se aproximaba rápidamente hacia nosotros.
Casi al segundo grité su nombre con total pánico pero antes de que pudiera si quiera reaccionar el coche impactó contra nosotros.
Cuando abrí los ojos solo pude ver los dos coches destrozados y la cabeza de Niall sangrando.
Yo también había resultado tremendamente herida pero no podía pensar en eso viendo que ni siquiera abría los ojos al gritar su nombre de nuevo.
Desabroché su cinturón como pude y lo acerqué a mis brazos.
Un hombre salió del coche contrario arrastrándose ya que el también había resultado terriblemente herido.
En ese momento pedí una ambulancia urgentemente por teléfono.
Cogí la cara de Niall entre mis manos sin parar de llorar descontroladamente.
- Te amo.
Le dije dándole un suave beso en la frente y tratando de notar sus pulsaciones sin éxito alguno.
- Por favor, no te vayas. - decia arropándolo entre mis brazos.
Pero jamás lo volví a ver sonreír.
Jamás podría volver a ver sus ojos al despertar, porque él jamás despertó.
