Pasó aproximadamente un semana _____ estaba bastante desmejorada, apenas comía, apenas salía de su habitación, las pocas veces que la veíamos saliendo era para irse y volver oliendo a tabaco.
Niall sigue en el hospital, yo e Isa vamos a verle de vez en cuando. No se lo quisimos decir a ____ pero está saliendo con su compañera de cuarto.
Ella y yo pensamos que aquí no pintamos nada, esto deben solucionarlo ellos dos. De hecho, estamos intentando no seguir aquí mucho tiempo porque nos sentimos incómodos con la situación.
- Harry, come algo. -dijo Isa que estaba delante de mi comiendose su plato de lo que había cocinado para nosotros dos, ya que a ___ dejamos de hacerle la comida porque nunca se lo comía.
- No tengo hambre.
- Esto es demasiado para todos. -dijo ella poniendo las manos en su cabeza frotando sus manos con frustración mientras se reposaba en la silla.
Me levanté decidido, iría a hablar con ____.
- Ahora vengo.
Toqué la puerta de su habitación a lo cual nadie respondió.
- ____... ¿estás despierta?
Intenté abrir la puerta pero estaba cerrada con pestillo.
- Mierda ____, por favor, abre. Necesito hablar contigo.
No escuché nada durante unos cuantos segundos más hasta que por fin escuché los pasos acercándose a la puerta, quitó el pestillo pero no abrió la puerta.
Di un suspiro y entré. Las persianas de las ventanas estaban cerradas, había ropa tirada en el suelo y por supuesto olor a tabaco.
Volví a cerrar la puerta y me puse delante de ella, que estaba sentada en la cama.
- ¿Que estás haciendo con tu vida, ___? Tu antes no eras así.
- Las personas cambian. -respondio ella mirando a un punto fijo.
- ¿Puedes decirme la verdad de todo?
Ella bajó la mirada, empezó a llorar y me acerqué a ella, poniendome de cuclillas le aparté el pelo de la cara y la abracé.
- Esto es mucha mierda para mí. -dijo ella abrazandome fuerte.
- Estoy aquí contigo, no estás sola en esto. Esto sólo es un bache en el camino. -dije acariciándole la cabeza.
Me senté a su lado y cogí sus manos.
- Pero escuchame. Tienes que dejar de fumar y comer más. No quiero que acabes en el hospital también.
- No se si podré...
- Hazlo por mí ____. Hazlo por nosotros.
- No he tenido nada fácil en todo este tiempo.
- Lo sé...
- Lo haré sólo por ti.
- Esa es mi pequeña. -dije volviendo a abrazarla.
Cuando la solté le miré, no sabía si hacerle esta pregunta pero...
- Oye ____... ¿te puedo hacer una pregunta?
- Claro.
- Alguna vez... ¿has pensado en suicidarte?
- Si. Muchas veces. -dijo mirando un punto fijo. -Me siento inútil en todo, siento que no sirvo de nada.
La cogí de las muñecas suavemente y las gire para verlas.
-En cambio, no me corto para suicidarme de esta manera, lo hago porque me gusta sentir el dolor. -dijo cuando le vi las muñecas con todos esos cortes.
- Vas a salir de todo esto. Creeme. -dije besándole la frente. -Anda, vamos a comer. -cogiendole la mano mientras me levantaba.
- No Harry...
- Aunque sea un poco.
Salimos de su habitación, me giré a verla y ella cerró un poco los ojos porque la incomodidad de la luz.
Se me escapó una pequeña sonrisa.
La senté en una silla enfrente de la mesa donde aún estaba Isa y ella se levantó para coger un plato más y hacer un poco más de comida.
- ¿Como va Niall? -dijo ____ mirando fijamente la mesa.
Yo e Isa nos miramos, ella me señaló a mi indicando que hablara yo. Gracias Isa.
- Va... bien. -respondi con una pequeña sonrisa.
- Sabes que estoy hablando de cómo va con la estúpida esa.
Isa y yo nos volvimos a mirar y ella me decía que no con la mano, osea, que le mintiera.
- Casi no hablan, él no quiere saber nada de ella.
- ¿En serio? -dijo mirándome a los ojos. Su mirada en ese momento podría matar a cualquier persona.
- Si. Dijo que te echaba de menos.
Isa se giró a mirarme con los ojos y la boca totalmente abiertos. Empezó a hacer un montón de movimientos con las manos, de desesperación.
____ se giró a verle y ella siguió haciendo la comida con una sonrisa forzada.
- Ya casi está.
Cuando ___ se volvió a girar me miró y le dije para cambiar de conversación:
- ¿Quieres ver una peli luego?
- Quiero ir a verle.
Ahora si, Isa y yo nos miramos totalmente petrificados.
- ¡Ya está la comida! -dijo ella haciendo ruido con los platos y poniéndolos sobre la mesa.
- ¡Que guay! ¡Me muero de hambre! -dije yo disimulando.
- Si no venís conmigo, voy yo sola.
