| C A P I T U L O 2 0 |

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Narra Sebastián:

Día 6, mi amigo Roberto me ha acompañado durante todo el día, a veces me habla, otras veces comienza a gritarme de demasiado y a decirme lo infeliz que seré. Me siento aún más incómoda con Sulemma, ella solo me recuerda cosas de mi infancia, siempre intercalando idiomas, otras voces simplemente son difíciles de entender, pareciese que su dialecto invocan a algo o alguien. Me da miedo decirle esto a alguien, el doctor tuvo la sospecha hasta que sin rodeos le dije de estas extrañas manifestaciones, puede ser esquizofrenia.

—Parce, tu mamá ya llego— aviso Ruíz entrando a la habitación donde me encuentro

—Siento una pesadez en mis hombros, como si hubiese corrido un maratón— exprese frotando mis hombros en círculos

—Perder energías no es lo tuyo, pero mira, come una barrita— me entrego una barrita de nuez chocolatada que había en la mesa del cuarto

—Pero que las peces no naden en las nubes que se mueren así—

Narra Ruíz:

Sebastián había empezado a decir cosas sin sentido. Pensaba en cosas que jamás sucederían y su lenguaje había cambiado notoriamente.

—¿Sabes algo de ______?— cuestionó fríamente

—No te ves muy emocionado— me burle de su expresión

—Estoy emocionado— hablo sin expresión alguna

—Mírame— le pedí a mi amigo, este al instante negó con la cabeza, cual niño pequeño

—No le haré caso— dijo Sebastián musitando —Él es mi amigo pero me quiere hacer algo malo— volvió a decir escondiendo su rostro bajo las sábanas

—Sebastián, vamos amigo— lo anime —no te haré daño—

—Ese pato rosa es tuyo, Sulemma me dijo—

Clara mente no había ningún pago rosado, comenzaba a sentirme temeroso, miedo de las actitudes de mi propio amigo.

Narra Arango:

—¿Cómo está mi hijo, doctor?— cuestionó su madre un tanto angustiada

—Señora no le tengo buenas noticias— sacó su portapapeles y empezó a dictar
—Sebastián presenta síntomas de esquizofrenia, sus alucinaciones han ido un poco lejos, las voces los martirizan y debemos entrar en tratamiento con el.—

—¿Qué clase de tratamiento?— cuestione dudoso

—Antes que nada medicamentos antipsicoticos, vamos a darle rehabilitación y le asignaremos un psiquiatra— hablo el hombre de la bata blanca, su intención solo era ayudarnos, pero a mí me empezaba a angustiar.

—Bien, entonces no se diga más, que no quiero ver a mi hijo así— su madre soltó en llanto, claramente nadie quiere ver a su hijo en medio de alucinaciones y fantasías inexistentes. Por lo menos yo no, yo no quisiera ver a mi amigo a si siempre.

"Fuerza Sebastián"

"Sebastian, te amamos"

"Siempre juntos"

"Esto es para siempre, siempre contigo"

"Vamos a salir de esto"

Leía y leía todos los comentarios que le hacían sus PDCs a Sebas, tiene una gran familia y gran apoyo.
No quiero culpar a nadie, pero _______ es la única culpable. Si, ya la estoy culpando a ella. Sino, ¿quién más lo serían? Si ella no hubiese dejado falsas ilusiones él estaría consiente de que ella no volvería en un tiempo, pero él solo cuenta los días para poder verla de nuevo. Eso no es amor por parte de ella, Sebastián dejo a miles por ella, Sebastián renunció a grandes proyectos por ella, Sebastián dejo tanto por ella y ella no podía dejarlo todo por él.

—¿Quieres pasar?— hablo Ruíz saliendo de la habitación de Sebastián

—No amigo, no puedo verlo así— musité

—Esta clínica me da miedo— hablo estúpidamente

—Eres tonto, Mario. Eres tonto—

—Llamaron Juana y Jaramillo, ya vienen para acá— notificó.

—Bien, que me han confirmado los Bautista que también ya vienen para acá—

—Espera, una llamada— sacó su teléfono para ver la pantalla. Nuestra piel se helo al ver lo que decía

—_______ esta llamándome—

Intercambio | T2 | Sebastián VillalobosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora