Here With Me. ♡ [Jake Bugg]

Capítulo 23 (Final)

Me quedé quieta, tenía toda las cartas frente a mi, tenía los ojos llenos de lágrimas y mi alma se comenzaba a quebrar en mil pedazos.

Jake siempre quiso regresar, tuvo un pequeño error, pero, si estaba enamorado de mi.

No sabía ni como reaccionar, quería correr, gritar, besarlo, abrazarlo, quería tenerlo en mis brazos y decirle lo mucho que lo amaba, pero era demasiado tarde.

No recuerdo más de ese día, solo fueron lágrimas. Mi madre llegó en la madrugada del siguiente, a ella le caía muy bien Jake, no podía creerlo. Por la mañana fui con Víctor, Sarah, Fer y mi madre a la casa de Jake, mi madre quería dar el pésame, siempre pensó que Jake era bastante guapo, un chico inteligente, gentil, amable y un excelente novio para mi y yo, estaba muy de acuerdo con ella.

Llegamos al rededor de las 3:30. Afuera de la casa, estaban los chicos con los que solía juntarse Jake, me vieron y el chico que había dicho que hacíamos bonita pareja, corrió a abrazarme.

-Jake te amaba bastante. -me apretó más fuerte y sentí como su ser se derrumbaba.
Los demás chicos se acercaron.

-Lo sentimos. -caminaron y se despidieron.

Me quedé pensando en ese "lo sentimos" en realidad ellos no lo sienten de la manera en que yo lo estoy sintiendo, me estoy muriendo por dentro, muero de impotencia, porque fui una estúpida, quise evitar a Jake a toda costa cuando él me amaba. Dejé que Víctor controlará un poco de mi vida. Es claro que jamás odiaría a mi hermano, pero si le tenía resentimiento. Porque no me contó de las cartas, de lo mucho que me estuvo buscando. Porque no dejó que hablará con él una puta vez más. Lo más estúpido es que por querer guardar mi puta dignidad, no le hablé por no tener respuesta en la carta que le había mandado. Claramente la tuve, pero yo nunca me enteré y me sentía bastante patética por eso, pero si tan solo lo hubiera ido a buscar, me hubiera enterado de todo, si tan solo le hubiera hablado aquella vez en la cafetería. Todo hubiera sido distinto. O si la última vez que vi a Jake, cuando vino a mi casa y Me besó, si tan solo esa vez le hubiera dicho que lo amaba, que se quedara. Jake no estaría muerto.

Entramos a la casa, mi madre llevaba un estofado, creía que la madre de Jake no había probado bocado y era razonable, después de perder a su único hijo y de esa manera, nadie tendría ganas. Creía en la posibilidad de que ella me odiara, pero al parecer no lo hacía.

Dentro de la casa de Jake, ya solo se encontraban flores y algunas veladoras, por los típicos rezos que se hacen en la religión. Estaban unos tres señores, dos con parejas, esposas, no sé. La mamá de Jake estaba al fondo y entre sus manos traía una foto de él, cuando era pequeño, al verla no pude evitar que de mis ojos corrieran lágrimas.

Ella se levantó y me abrazó, sentí su calidez, su dolor, su amor...

-Tengo que darte algo, a Jake le hubiese gustado que tuvieras eso. -me dijo.

Subimos a la habitación de Jake y cuando entré fue como si me encerrara en un mundo paralelo, era el pasado y me vi a mi y a Jake, aquella noche que hablamos de nuestra infancia, de nuestros miedos, nuestros gustos, de nuestra vida y esa noche misma nos fundimos en cuerpo y alma, por un momento sentí de nuevo sus caricias, sus besos en mi cuello y su lenta respiración cuando comenzaba la penetración, recordé su rostro, cuando desperté, me encantaba todo de él, sentía que...

-Hija, ven ayuda me. -ella me interrumpió, tratando de bajar una caja.

Reaccioné y fui a ayudarle, apoyamos la caja en la cama y comenzó a sacar algunas cosas, había una cajita negra, rectangular y con la tinta dorada que amaba firmar Jake decía mi nombre. Lo tomé y lo miré, queriendo grabar cualquier mínimo detalle.