El comienzo

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Mientras tanto en el universo 10 Zamasu y Goku Black pensaban en la manera de cómo llevar a cabo su plan, anteriormente Gowuasu le mostró a su aprendiz lo que un saiyayin una raza guerrera es capaz de lograr, en ese momento Zamasu del presente se percató que en la mano de Black se encontraba un misterioso anillo del cual comprendía su poder, Black lo miró fijamente:

–Me imagino que querrás saber de qué se trata el anillo que porto, ¿No es así?

Zamasu de manera seria asintió de manera afirmativa preguntándose así de lo que se trataba, así que lo miró fijamente y levantó su mirada hacia él:

–Ya lo veo, así que fue este tú plan para llegar hasta aquí, ¡Vaya sorpresa! Eso significa que dominaste varias fases en el tiempo, ¿cierto? —Sonríe confiado—

–Exacto, eres muy observador, tal como te lo había dicho antes, al obtener el anillo del tiempo es así como me encuentro aquí, en este lugar, en este tiempo buscándote. —Lo mira fijamente—

Black comenzaba a caminar por el templo junto a Zamasu, se muestra confiado, cierra sus ojos lentamente y toma por su parte al mayor...

–Ya que tengo este anillo del tiempo, deberías hacer lo mismo, gracias a las súper esferas del dragón pude lograr tener el cuerpo de Son Goku, sería de gran ayuda que tú... —Le sonríe de manera escabrosa—

—¿¡Qué yo...!? —Responde boquiabierto—

Al escuchar las palabras de Black queda completamente petrificado, era la oportunidad perfecta para poder lograr sus objetivos sin que nadie pudiese detenerlo, se dirigió hacia el templo, buscando así aquel cofre el cual su maestro le mostró, recordando así el por qué Bills el Dios de la destrucción y Wiss lo buscaban con tantas ansias, por lo tanto desde la visita al planeta Babari y la explicación del supremo kaiosama sobre la posibilidad de poder viajar hacia el futuro le causó al menor una gran satisfacción...

–¿Sabes Black...? He pensado, sería una excelente idea usar las súper esferas del dragón para terminar con ese inmundo mundo lleno de humanos...

Black lo interrumpe, cambiando así su expresión:

–No digas tonterías, vayamos por las esferas del dragón, lo que quieras saber yo lo aclararé, estas esferas están repartidas por los diferentes universos, pueden conceder deseos al utilizar el idioma de los dioses invocando así a súper shen long, no sabia anteriormente de su existencia...

Black es interrumpido por Zamasu quien asombrado le pregunta:

–¿Pero como pudiste averiguar de su existencia? No puedo comprenderlo —Lo toma por su hombro—

Black toma a Zamasu de igual forma hacia su hombro:

–...gracias al gran Zumo pude averiguar qué eran y claro, sobre son Goku, sus habilidades.

–¡No puedo creerlo! —Se toma su cabeza—

Zamasu voltea asombrado, una sonrisa comienza a aparecer en su rostro, la sorpresa que Black le había dado hizo nacer sus esperanzas de impartir justicia...

–¿Y bien, Zamasu?

–Vaya, ahora comprendo, creo tener una idea, utilizaré tu misma estrategia... —cierra sus ojos y sonríe—

Zamasu y Black se miraron, reían juntos, así que salieron del templo para así con el anillo del tiempo y los arcillosos emprender el viaje,  aprovechar la oportunidad de obtener las esferas del dragón y así mismo pedir ese deseo del cual Black estaba bastante curioso.

            Al reunir las esferas

Al viajar hacia los universos para poder tener las súper esferas del dragón, algo en Black comenzó a estremecerse, estar junto de Zamasu era una sensación de tranquilidad absoluta, en ese momento Zamasu miró con mucha satisfacción que las esferas hacían aparecer al gran Shen Long, su esplendor era impresionante, un destello dorado comenzaba a extenderse, le impresionaba llegar a cumplir su sueño. Shen Long preguntó emitiendo el idioma de los dioses asimismo Zamasu quien dominaba con perfección el idioma:

–¿Cuál es tu deseo?

–¡Deseo ser inmortal! 

Algo en Zamasu en ese momento comenzó a cambiar, no solo de manera superficial sino también dentro de él, una gran infinidad de sentimientos perturbadores, su mirada se hacia cada vez más tétrica y profunda, su sonrisa que expresaba confianza y valentía se hizo aún más fuerte, la sensación fue para el demás grata.

–Ha llegado el momento, ahora ningún mortal podrá detenerme.

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Enamorado... ¿¡DE UN MORTAL!?     (PAUSADA Y EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora